• En la situación actual de confinamiento, “espacio e inmersividad están muy presentes y en definitiva marcarán una nueva forma de vinculación con el sitio, con lo intangible”, apuntaron.

Por: Redacción/

Resulta importante romper la serie de mitificaciones imperantes que no deja entender de manera clara que en el mundo contemporáneo existe una dependencia en ambientes artificiales subordinados al ser humano, aseguró el doctor Jesús Fernando Monreal Ramírez, académico de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), en el Conversatorio: Espacio-inmersividad: miradas desde la transdisciplina.

Por tanto, “es necesario estudiar el espacio, la inmersión y la inmersividad partiendo de que seguimos reproduciendo esquemas dualistas cuestionados desde la teoría, como en 2020, cuando la tendencia fue hacia lo digital y lo virtual, pero se siguieron debatiendo asuntos como la negativa a la dicotomía entre humanidad y máquinas”.

Ahora es imperativo analizar estos tópicos desde otras perspectivas, por ejemplo, desde la ciencia y la tecnología, reconociendo la codependencia presente entre personas y aparatos.

Sin embargo, “si seguimos con estos esquemas dicotómicos no aprovecharemos las posibilidades que tienen estas relaciones y las oportunidades más allá de la práctica y experiencia inmersiva”, enfatizó el docente del Departamento de Artes y Humanidades de la Unidad Lerma.

En la situación actual de confinamiento, “espacio e inmersividad están muy presentes y en definitiva marcarán una nueva forma de vinculación con el sitio, con lo intangible”, apuntó.

El doctor Juan López Sauceda, profesor del Departamento de Sistemas de Información y Comunicaciones de la misma sede universitaria, consideró que “entendido como orden, el espacio intangible –que parecería abstracto– puede ser usado como un detector de vida para, basados en él, generar construcciones teóricas para comprender y resolver problemas determinados, como mejorar la calidad de vida de las personas”.

Con la evolución los organismos son cada vez más resilientes y robustos ante perturbaciones del exterior, y tales configuraciones biológicas tienen el potencial de almacenar datos, “que nos pueden llevar de una manera muy articulada a abordar a partir de la ciencia temas de la filosofía que se trabajan desde hace milenios”.

El encuentro fue moderado por el doctor Edmar Olivares Soria, académico del Departamento de Artes y Humanidades, quien recordó que en México prácticamente no hay grupos desarrollando reflexiones o investigación académica rigurosa en torno al espacio, la inmersión y la inmersividad.

A partir del Coloquio internacional de Inmersividad, celebrado por la Unidad Lerma de la Casa abierta al tiempo desde 2018, fue editado el libro Miradas desde la transversalidad filosófica-arte-ciencia-tecnología, coordinado por la doctora Claudia Mosqueda Gómez y él, en el que colaboran con artículos los participantes del conversatorio.

Como lo refiere el texto, “las elucubraciones sobre estos objetos de estudio tratan de abrir las investigaciones al horizonte de convergencia actual entre disciplinas y actores heterogéneos”, concluyó.

El Conversatorio: Espacio-inmersividad: miradas desde la transdisciplina forma parte de la serie UAM, responsabilidad social, que se transmite todos los miércoles a las 12:00 horas, con la conducción de Carlos Urbano Gámiz, por UAM Radio 94.1 FM.