Por: José Manuel Mota Fernández/

La sequía se terminó, lurgo de tres años, Cruz Azul volvió a meterse a la liguilla luego de haber derrotado por la mínima diferencia a los Tiburones Rojos de Veracruz. Felipe fue el encargado de catapultar a los celestes a la fiesta grande con un cabezazo en la parte complementaria.

La primera mitad del partido fue de ida y vuelta pero se inclinó en mayor parte para los cementeros, ya que fueron ellos quienes incomodaron en repetidas ocasiones a Melitón Hernández, sin embargo, los embates del equipo cementero no fueron suficientes para romper el marcador.

Tiempo después llegó la más clara del partido cuando Óscar Macías Romo señaló penal a favor de los cementeros. El encargado de mover desde los 11 pasos fue Francisco ‘Gato’ Silva, quien intentó romper las redes por la base del poste izquierdo, pero el palo evitó la conquista.

Por su parte, los Tiburones Rojos de Veracruz tuvieron su primer tiro a puerta enemiga al minuto 29, cuando Richard Ruiz probó suerte desde las afueras del área y mandó su derechazo directo al travesaño de la portería defendida por José de Jesús Corona que ya estaba vencido.

Antes de que se terminara la primera mitad, los celestes estuvieron cerca de abrir el marcador, primero con un cabezazo eque tapó Melitón Hernández y más adelante con un tiro libre de Adrián Aldrete que superó la barrera y terminó escapándose por un costado del palo derecho.

De igual manera, la parte complementaria comenzó con más posibilidades para los locales, y pocos minutos después de haber iniciado el complemento, un disparo desde afuera del área terminó rebotando en el pie de Melitón Hernández para después abandonar el terreno de juego.

Para el minuto 64, los esfuerzos de la Máquina Cementera se reflejaron en el marcador gracias al cabezazo de Felipe Mora. El encargado de romper el cero fue Felipe Mora, quien se levantó en un tiro de esquina y con la testa definió al palo contrario de Melitón.

Los escualos se volcaron al frente con la intención de no iniciar con problemas de descenso el siguiente torneo, estuvo cerca de igualar el marcador con un centro para Menendes que no pudo rematar de manera contundente para igualar el marcador.

Para terminar el partido, la impotencia de los jarochos comenzó a notarse, de hecho, Lucas Rodríguez hizo amonestar dos veces en menos de dos minutos para dejar a su equipo con 10 hombres y muy poco tiempo para que intentaran reaccionar.

Ahora, Atlas deberá esperar el resultado de Necaxa para saber si entra o no a la fase final.