Por: Redacción

El Museo de la Ciudad de México tuvo durante su primera Noche de Museos del año a 2 mil 193 visitantes, quienes disfrutaron de las cinco exposiciones que alberga el recinto, el clásico recorrido por las instalaciones del Antiguo Palacio de los Condes de Santiago de Calimaya, la charla-concierto “Un instrumento olvidado: La guitarra séptima mexicana” y la propuesta audiovisual del artista japonés Sync Kudo.

Llevada a cabo el pasado miércoles 25 de enero, la primera Noche de Museos de 2017 ofreció en este recinto de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México diversas actividades para el disfrute de público de todas las edades, integrado por familias, parejas, amigos en grupo, que se dieron cita desde las 18:00 hasta las 22:00 horas que abarca el horario nocturno.

A partir de las 18:00 horas los asistentes se distribuyeron a lo largo de las cinco exposiciones que ofrece el recinto: Changarrito en acción, Ciudad de México y arte digital: Luz e imaginación, Pablo O’Higgins: Colección litográfica donada por María de la Fuente de O’Higgins, por la muestra fotográfica Duffy/ Bowie: Five Sessions y la exhibición Ojo-hoja: La mirada suspendida en la ciudad del artista plástico Juan Iván González de León.

Una hora más tarde dio inicio la visita guiada caracterizada, a cargo de la actriz Nelly López, quien en el papel de la nieta de Don Juan Gutiérrez Altamirano, fundador del linaje de los Condes de Santiago de Calimaya, brindó un recorrido por distintos espacios históricos del museo contando anécdotas, leyendas e historias de quienes fueron los habitantes del recinto.

A las 20:00 horas, el historiador Jaime Ruedas Salas y el septimista Martín Valencia Rosas presentaron en el Patio Secundario del recinto la charla-concierto “Un instrumento olvidado: La guitarra séptima mexicana”, en el que los especialistas narraron los casi 200 años de este instrumento que tiene sus inicios a principios de siglo XIX.

Ruedas Salas señaló que posterior a la Independencia de México, cuando aún se sentía la lucha entre mexicanos y españoles, “los mexicanos decidieron hacer algo que los diferenciara y que culturalmente los hiciera sentirse superiores”.

“En ese momento la guitarra española de seis cuerdas era muy común; entonces los mexicanos deciden adoptar y desarrollar como propio un instrumento de una cuerda más, cuerda cuyo número simboliza la perfección y fue así que nació esta guitarra séptima que proporcionaba sonidos más graves que la guitarra española no podía ofrecer”, explicó el historiador.

Los especialistas compartieron que este instrumento fue adoptado por diversos ritmos como los jarabes y el género romance, entre otros, así como en las orquestas típicas y danzoneras, que pronto dieron legitimidad al nuevo instrumento. Además, informaron al público que los compositores más importantes de esta guitarra fueron José María Bustamante e Ignacio Ocadiz.

“A partir de la década de 1920 se le empezó a dar un auge cada vez mayor a la guitarra sexta a nivel mundial gracias a la labor realizada por el guitarrista español Andrés Segovia, quien sostuvo a la guitarra de seis órdenes como la guitarra por excelencia y su fama hizo que las compañías discográficas, la radio y más adelante el cine empezaran a darle primacía a esa guitarra por encima de otras”, aseveró Ruedas Salas.

A lo largo de la charla, la historia del instrumento era pausada por la ejecución magistral de una guitarra séptima de 1876 en manos del músico Martín Valencia Rosas, quien interpretó reconocidas piezas como “Domitila” de Octavio Núñez, una adaptación a la guitarra séptima de la “Marcha Nacional Mexicana”, del pianista austriaco Henri Herz, y el vals “El obsequio”, de José María Bustamante, entre otros temas.

A las 21:00 horas, las actividades culminaron con la propuesta audiovisual del artista japonés Sync Kudo, quien presentó a los asistentes un video-mapping de algunos diseños de su creación conectados a través del sonido, que dieron vida a orgánicas animaciones inundadas de colores yuxtapuestos al ritmo de la música electrónica que el artista improvisó.

La Noche de Museos es organizada por la Secretaría de Cultura capitalina con el propósito de atraer nuevos públicos a los museos en un horario poco usual (cuando las personas han salido ya de la escuela o el trabajo), así como para difundir la riqueza del patrimonio histórico, artístico y cultural de la capital del país.

En este programa participan cada mes alrededor de 40 museos del Centro Histórico de la Ciudad de México y las Delegaciones Coyoacán, Gustavo A. Madero, Cuauhtémoc, Miguel Hidalgo, Venustiano Carranza y Álvaro Obregón, a través de distintos circuitos culturales. En esta primera Noche de Museos de 2017 se incorporó al programa La Casa del Poeta, ubicado en la calle Álvaro Obregón 73, colonia Roma, sede del Museo “Ramón López Velarde” y de las bibliotecas “Salvador Novo” y “Efraín Huerta”.