Por: Redacción/

La coordinadora del Grupo Parlamentario del PRD, Verónica Juárez Piña, consideró imprescindible garantizar que las instituciones del Estado, entre ellos los Poderes de la Unión y los órganos autónomos, generen condiciones para que las y los mexicanos puedan ejercer sus derechos en las mejores condiciones y contribuyan al fortalecimiento de la democracia.

En un comunicado, la diputada informó sobre su participación en el Foro “Elecciones 2020-2021: ¿Pluralismo o Presidencialismo?”, en el cual enfatizó en la necesidad de que el Estado cuente con normas y prácticas adecuadas que posibiliten el acceso real a los derechos democráticos.

En su exposición, lamentó que, a pesar de los avances en la normatividad electoral, el grupo en el poder haya aprovechado resquicios legales para hacerse de una mayoría artificial en el Congreso de la Unión, con lo cual ignora a los partidos que, aunque minoritarios, en conjunto representan a la mitad de la población.

“En este sentido, podemos afirmar que el Presidente se ha convertido en el Primer Legislador, pues de 25 iniciativas enviadas por el Ejecutivo, 23 han sido aprobadas y 20 ya son reformas vigentes, lo cual nos proporciona una idea del impacto que esta sobrerrepresentación -la de Morena y sus aliados- ha tenido en nuestro marco jurídico”, expresó la perredista.

Reconoció que a este abuso de poder contribuyó la crisis, el desprestigio y la falta de credibilidad hacia los partidos existentes, lo que la izquierda ha enfrentado con el impulso a diversas reformas a la norma electoral, las cuales permitieron el arribo del actual Presidente de la República.

Refirió que una situación similar se vivió en el sexenio de Vicente Fox Quesada, quien perdió en la segunda mitad de su mandato la mayoría de su partido en el Legislativo, por lo que la aprobación de sus proyectos debió resultar de negociaciones y consensos parlamentarios.

Lo mismo ocurrió durante las presidencias de Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto. Sin embargo, hoy el país ha vuelto a un “sistema de partido de Estado hegemónico” que pretende eliminar los contrapesos constitucionales construidos a lo largo de muchos años por las fuerzas democráticas, añadió.

Consideró como lo más grave el que ahora ese partido de Estado y el presidencialismo al cual obedece atente contra órganos autónomos, como el mismo Instituto Nacional Electoral (INE), con el pretexto de la austeridad, cuando lo que realmente se busca es un control político unipersonal.

Prueba de esto es la anulación de facto de la autonomía de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos y la imposición de una presidencia que permanece impávida mientras se violentan las garantías más elementales de quienes residen o transitan en territorio nacional, todo ello con el pretexto de la austeridad, concluyó.