Por: Javier Bárcenas

El vicecoordinador del PRD, el diputado Jesús Zambrano Grijalva, expresó el rechazo a la iniciativa de Ley de Seguridad Interior propuesta por el PRI debido a que constituye un atentado a los Derechos Humanos, la Constitución, a las instituciones democráticas y civiles del país, de aprobarse dicha iniciativa, quedarían sometidas a las fuerzas militares.
“Qué bueno que se reconoció que todas esos elementos presentes en la iniciativa, no deberían estar. Si se les quita, ¿qué queda?”, cuestionó.

Dijo que lo que el país no es una “Ley de Seguridad Interior”, mucho menos la propuesta por los priistas, sino una ley sobre mando mixto policiaco como la que ya aprobó la Cámara de Senadores y que está en revisión en la Cámara de Diputados, así como la actualización de otras normas.

Zambrano Grijalva advirtió que una ley sobre seguridad interior como la planteada por los priistas conllevaría a quitar toda responsabilidad a las autoridades estatales y municipales para mejorar sus cuerpos policiacos y ministeriales, así como a validar la permanencia de los militares en las calles, pero además sin control alguno.

Indicó en que, bajo las actuales circunstancias, sería irresponsable el retiro de los militares de las tareas de seguridad pública abruptamente, ya que deberá darse un trabajo acompasado entre su repliegue, la legislación sobre mando policiaco mixto, la mejora efectiva de los cuerpos policiacos y la reglamentación del artículo 29 Constitucional sobre declaratoria en materia de “Estado de Excepción”.

Se pronunció por dotar de cuanta herramienta legislativa sea necesaria para que el Estado de Derecho y la seguridad pública sean posibles en el país “Nuestra propuesta de estrategia es crear el Mando Mixto y fortalecer las policías locales”, puntualizó.

Insistió en la conveniencia de desahogar la minuta que en esta materia envió el Senado de la República y en reformar cualquier otra ley que fuese necesario para que, mediante un conjunto de mecanismos y acuerdos, se obligue a las autoridades locales a tener policías eficaces y eficientes, siempre apegadas a respetar Derechos Humanos y atendiendo las recomendaciones que organismos nacionales e internacionales han hecho al respecto.