Por: Araceli Isidro

Leopoldo Eduardo López Mendoza salió de cárcel después de tres años de prisión, es el principal opositor del gobierno venezolano, representado por Nicolás Maduro Moros. De acuerdo con información de su abogado, Javier Cremades, a través de sus redes virtuales, el hombre quedó bajo arresto domiciliario.

En febrero de de 2014 se giró la orden de aprehensión en su contra, luego de que hiciera un llamado a la protesta por la situación de violencia en su país, al ser capturado, lo trasladaron a una cárcel militar.

En su llamado proponía tres puntos para el cambio: “Protestar”, “Proponer” y “Organizarnos”. El primer elemento convocaba:

“Protestar pacíficamente. Protestar por todas las vías posibles. Protestar en contra de policías delincuentes, de fiscales corruptos, de jueces cómplices y de penales inclementes. Apoyar y seguir el ejemplo de los médicos de Lídice, de los transportistas, de las comunidades que protestan, de los motorizados y, sobretodo, de las madres que nunca se dejan vencer por la desesperanza. No callar, nunca. Impedir que el miedo llegue a tal punto que dejemos de exigirle al estado su compromiso y su responsabilidad con la vida”.

El discurso publicado en su blog con el nombre “Leopoldo López”, inicia con un conteo de la violencia sucintada en Venezuela, hace un recuento sobre la situación que viven los jóvenes y señala al Estado como cómplice de los hechos:

“Ante un Estado cómplice por su omisión e incluso por promoción de la violencia, queda preguntarnos si, como ciudadanos, nos quedamos paralizados o nos activamos para cambiar esta situación”, escribió el fundador del partido Voluntad Popular.

Las manifestaciones en contra de Maduro han aumentado en los últimos días, en junio se reunieron los cancilleres de los países miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) para intervenir en la situación de ese territorio, pero no lograron acuerdos en común.