Por: Redacción/

La lactancia materna es vital para el desarrollo de los individuos, ya que tiene que ver con la programación metabólica y otras funciones importantes del organismo, afirmó la doctora Claudia Ivonne Ramírez Silva, investigadora del Instituto Nacional de Salud Pública y coordinadora del lactario Amigo-INSP.

Durante la Jornada Universitaria de Lactancia Maternarealizada en la Unidad Cuajimalpa de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), la especialista dijo que aunque existen evidencias sobre la importancia de esta práctica exclusiva hasta los seis meses de edad del bebé, la mayoría de las mujeres no lo hace, ya sea por desconocimiento o a causa de barreras sociales que inhiben su práctica.

“Durante los seis primeros meses los lactantes deberán ser alimentados exclusivamente con leche materna, estamos hablando de no agua, no jugos, no tés ni otros alimentos, incluso en áreas donde hace calor”, abundó.

La experta en nutrición explicó que el tipo de alimentación durante la etapa postnatal (menores de dos años), puede modificar la expresión génica, determinar la capacidad funcional y la competencia metabólica, así como las respuestas al medioambiente.

Estudios recientes han encontrado que aunque la etapa gestacional es fundamental, la nutrición con leche materna en la etapa posnatal juega un papel muy importante, ya que este alimento posee un factor de protección contra enfermedades crónico-degenerativas.

Investigaciones internacionales refieren “la relación de la lactancia materna con padecimientos como el sobrepeso, obesidad, asma, diabetes mellitus, alergias, hipertensión e hipercolesterolemia, tanto en edades tempranas como a largo plazo”.

Ramírez Silva aseveró que es el alimento natural por excelencia, ya que ayuda en el adecuado funcionamiento y programación del organismo para tener una apropiada respuesta metabólica, nutricional y del nivel de salud en el medioambiente.

Pese a ello, existen muchas barreras que impiden una cultura en relación con esta actividad, una de ellas es el trabajo fuera de casa, resultado del incremento en la participación de las mujeres en el ámbito laboral, ya que muchas veces no cuentan con las condiciones necesarias para amamantar.

Ante este panorama la Organización Mundial de la Salud (OMS) y otros organismos promueven planes como la Estrategia Mundial para la Alimentación del Lactante y del Niño Pequeño para proteger, promover y apoyar la provisión de estos grupos, pensando en que la nutrición es un componente fundamental y universalmente reconocido.

En México también se han implementado planes como la Estrategia Nacional de Lactancia Materna 2014-2018, cuyo objetivo es fortalecer las competencias institucionales para la protección, promoción y apoyo de la lactancia en instituciones públicas y privadas.

Estas estrategias plantean medidas de alta prioridad como la instalación de lactarios, espacios designados de manera exclusiva para esta función, favoreciendo a las mujeres contra las fuerzas que puedan alterar esa práctica

La investigadora del INSP destacó la necesidad de promover las condiciones mínimas para cumplir con estos objetivos, como la formación de redes de apoyo, el respeto de las licencias de maternidad remunerada, arreglos de trabajo de tiempo parcial, la instalación de guarderías y espacios para extraer y almacenar la leche materna en el lugar de trabajo.