Por: Luis Alberto Rivas 

“Si Clark quisiera podría utilizar su supervelocidad y aplastarme contra el cemento. Pero sé cómo piensa él. Tiene una gran debilidad, mucho más grande que la kryptonita. En el fondo, Clark es fundamentalmente una buena persona… y en el fondo, yo no”

Batman Hush, Jeph Loeb/Jim Lee

Batman vs Superman no es la adaptación de ninguna historia de DC cómics, es un argumento completamente nuevo que respeta y rinde homenaje tanto a los personajes, sus poderes, características y principios morales.

Así como a aquellos que han escrito durante décadas las historias del caballero de la noche, del hombre de acero y el resto de personajes de La Liga de la Justicia.

Diálogos y referencias que abren puertas a todo lo que Warner y DC cómics preparan para su Universo Extendido, así como escenas que son extraídas de las viñetas de historias cómo The Dark Night Returns; son algunos de los regalos que la película ofrece a sus fans.

Un conjunto de hechos sin conexión aparente llevan al momento cúspide de la cinta, que en cuanto comienza sigue en un ascenso que mantienen al espectador al borde del asiento en busca de respuestas y dura hasta el final del encuentro, cuando todos los hechos se conectan y dejan puertas abiertas para el siguiente encuentro de los héroes.

Down of Justice da la continuidad pertinente a Man of Steel, a la vez que sienta las bases para las películas en solitario de Wonder Woman, Batman, Flash, Cyborg y Aquaman.  No se pierde tiempo contando los orígenes de Batman, pequeños flashbacks bastan para contextualizar la aparición del vigilante de Gótica.

Cada personaje tiene su momento, teniendo más peso la perspectiva de Batman, desde la llegada de Superman a Metropolis hasta la pelea contra él. El público tiene la oportunidad de sentir empatía por la historia de Bruce Wayne, perdiendo la imagen de salvador que se tenía del hombre de acero. Aunque esta se recupera cuando se descubren las razones que Kal-El tiene para pelear.

Lex Luthor se aleja de la personalidad fría y calculadora que lo caracteriza en los cómics, manifestando una locura similar a la de El Joker, ejecuta sus planes de la misma manera que lo haría su homologo de las viñetas, durante toda la cinta manipula a los personajes y las situaciones para conseguir sus fines, con diálogos que pueden considerarse como una crítica a situaciones reales como el terrorismo, la religión y la política.

Batman se aleja de la versión realista que Christopher Nolan le dio al personaje en su trilogía, y se acerca a los orígenes del personaje, cuando él mataba si era necesario.

Por momentos el ritmo del filme es similar al de Watchmen, del mismo director, con ausencia de acción y el dominio de diálogos que contienen múltiples referencias que solo seguidores de cómics entenderán y que pueden aburrir a aquellos que no estén familiarizados con el trabajo de Frank Miller o Mike Carlin. Aunque las batallas, explosiones y secuencias de pelea son similares a las de Man of Steel.

Las opiniones respecto a la adaptación del encuentro entre dos de los titanes de DC cómics, se encuentran divididas, sitios especializados sostienen que la pelicula no es lo que promete, mientras otros argumentan que Sack Znyder logró una gran pelicula.

Para poder juzgarla es necesario considerar que no es la transición de una novela gráfica a la gran pantalla, y que su trama con sus altas y bajas, no está trabajada ni tan digerida cómo otras propuestas del género.

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