Por: Redacción

La diputada Elva Lidia Valles Olvera (PAN) impulsa una iniciativa para que el Estado promueva y asegure el relevo generacional en el campo mexicano, principalmente en zonas con mayor rezago social y económico, lo que evitaría la migración y vinculación de jóvenes campesinos a grupos armados y su participación en actividades ilícitas.

La iniciativa, que reforma y adiciona diversas disposiciones a la Ley de Desarrollo Rural Sustentable, establece que se entenderá por relevo generacional al proceso gradual y progresivo para transferir experiencias, conocimientos y desarrollar capacidades a los jóvenes productores rurales que se dediquen preponderantemente a actividades agropecuarias y agroforestales.

Lo anterior, contribuiría a reactivar el sector, favorecer la seguridad y soberanía alimentaria, sustentabilidad ambiental, productividad y competitividad, y en general, al desarrollo rural sustentable.

La secretaria de la Comisión de Desarrollo Rural, indicó que especialistas coinciden en que los constantes procesos de transformación estructural que sufren las zonas rurales se debe, entre otros factores, al envejecimiento de la población rural, desarrollo de tecnologías, nuevas demandas de calidad y seguridad alimentaria, así como a fenómenos como la migración, inseguridad y baja fecundidad.

De acuerdo con la Encuesta Nacional Agrícola (ENA) 2014, realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), 40.5 por ciento de los productores, es mayor a 60 años, 22.2 se encuentra entre los 26 a 45 años y sólo 1.2 por ciento corresponde a productores de 15 a 25 años.

Dichos datos, resaltó, suponen que en 10 años más nos enfrentaremos al reto de mantener el nivel de producción actual, si consideramos la disminución en la fuerza y vigor a causa del deterioro biológico en el sector rural. En tanto que 60 por ciento de los responsables de las Unidades Económicas Rurales (UER) tienen más de 50 años y sólo 40 por ciento son jóvenes, la mayoría mujeres.

En cuanto a la extensión territorial en las zonas rurales, las unidades de producción agropecuaria abarcan una superficie total de 109.3 millones de hectáreas, en tanto, la superficie agrícola total de las unidades de producción utilizadas es de 27.5 millones de hectáreas, lo que representa sólo 25.2 por ciento de la superficie total en todo el país.

Estos números, nos permiten tener una referencia de la enorme extensión territorial que tiene México para realizar actividades agropecuarias, agroindustriales o agro empresariales, lo que representa un espacio de oportunidad para el desarrollo y crecimiento de sus habitantes, principalmente, las nuevas generaciones.

La legisladora de Tamaulipas, precisó que aunado al envejecimiento de la población rural, los jóvenes campesinos reciben sólo 5 por ciento de apoyos gubernamentales a programas destinados al campo, en tanto, productores mayores de 60 años, el 60 por ciento.

Ante ello, las políticas y programas en materia de juventud no han sido suficientes para satisfacer las necesidades de este sector, ya que son a corto plazo y no contribuyen al desarrollo integral de los jóvenes, disminuyendo sus oportunidades futuras.

“De no revertirse la tendencia del envejecimiento en el campo, la competitividad y productividad del sector se verán amenazadas y traerán repercusiones en la autosuficiencia alimentaria, la rentabilidad y la tecnificación del sector”, advirtió.