Por: Redacción/

Las tensiones en Gaza han escalado drásticamente con el potencial de desestabilizar la región, advirtió Zeid Ra’ad Al Hussein este lunes ante el Comité del Ejercicio de los Derechos Inalienables del Pueblo Palestino, reunido en Ginebra.

El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos aseguró que la situación en la Franja es extremadamente frágil a pesar del alto al fuego que fue puesto en marcha a través de los esfuerzos de Egipto y las Naciones Unidas.

“Insto a las partes y a todos los que tienen influencia a hacer todo lo posible para evitar otra ronda de violencia y miseria”, dijo.

Agregó que los palestinos de Gaza soportan olas de violencia que empeoran la ya crisis humanitaria extrema.

“Niveles de desempleo y pobreza por las nubes, infraestructuras que se desmoronan, dependencia récord de ayuda para comer y un horizonte político desolador, están creando una devastación y privación masiva que es completamente provocada por el ser humano y es prevenible”, recalcó.

Zeid aseguró que en las pasadas dos semanas se han visto los intercambios de fuego más fuertes entre las autoridades israelíes y los grupos armados en Gaza desde 2014.

Las Fuerzas de Seguridad israelíes lanzaron al menos 28 ataques aéreos disparando más de 50 misiles; dos niños palestinos fueron asesinados.

“Hace apenas tres días, la situación casi estalló en un grave conflicto provocado por el asesinato de un soldado israelí y los asesinatos posteriores de cuatro civiles palestinos. Durante el fin de semana del 14 de julio, las Fuerzas de Seguridad israelíes lanzaron al menos 28 ataques aéreos disparando más de 50 misiles; dos niños palestinos fueron asesinados y 35 personas resultaron heridas”, explicó.

El Alto Comisionado aseguró que se han disparado unos 184 cohetes y granadas de mortero contra Israel, así como un número de cometas y globos incendiarios y recordó a todas las partes que el derecho humanitario internacional prohíbe el uso desproporcionado o indiscriminado de armas que conducen a la muerte y lesiones de civiles.

Una Comisión de Investigación Independiente
Zeid informó al Comité que su oficina se encuentra asistiendo en la formación de la Comisión Internacional Independiente de Investigación que será desplegada en la zona por mandato del Consejo de Derechos Humanos.

La Comisión tiene como mandato investigar las violaciones y abusos cometidos en la Franja de gaza, donde más de 100 palestinos, incluidos 17 niños, fueron asesinados durante protestas que comenzaron el 30 de marzo. Unas 4100 personas resultaron heridas.

“Es esencial que las autoridades cooperen con la futura Comisión para avanzar en la rendición de cuentas por estos homicidios, así como por todas las presuntas violaciones y abusos del derecho internacional humanitario y del derecho internacional de los derechos humanos”, aseguró.

De acuerdo con el Alto Comisionado, aunque Israel ha establecido una serie de mecanismos de rendición de cuentas, existen serias preocupaciones de que no cumplen con los estándares internacionales de independencia, imparcialidad y eficacia. “Muy pocas investigaciones alguna vez ocurren y en los raros casos en que una investigación ha llevado a una acusación, la sentencia ha sido extremadamente indulgente a la luz de la gravedad del delito cometido”, dijo.

Terminar con la ocupación, el único camino a la paz
Zeid recalcó que es vital también abordar las causas fundamentales de las recientes manifestaciones, entre ellas las condiciones de vida extremadamente inadecuadas de los residentes de Gaza, la mayoría de los cuales son refugiados a causa de la ocupación y los once años de bloqueo por parte de Israel.

Además, la crisis financiera de la Agencia de la ONU para los Refugiados podría provocar recortes en programas que proporcionan alivio humanitario a millones de estas personas.

El Alto Comisionado también se refirió a la adopción de la Ley Básica del Estado-Nación por parte de Israel la semana pasada, diciendo que esta, al “anclar la discriminación inherente contra las comunidades no judías”, podría exacerbar aún más las tensiones.

Zeid expresó preocupación una vez más ante la serie de demoliciones programadas en Cisjordania, así como por los cientos de niños palestinos y defensores de los derechos humanos que permanecen detenidos sin cargos por las autoridades israelíes.

“Solo el fin de la ocupación puede lograr una paz duradera y establecer las condiciones en las que los derechos humanos de todos puedan ser plenamente respetados y cada parte respete la humanidad y la igualdad del otro. Todos los Estados tienen la responsabilidad de hacer realidad esta esperanza, prometida pero negada durante tanto tiempo”, concluyó.