Por: Redacción 

El Presidente de la Unión Nacional Integradora de Organizaciones Solidarias y Economía Social, Javier López Macías, aseguró que México enfrenta una cruel paradoja “produce suficientes alimentos y hay 28 millones de mexicanos en pobreza alimentaria, es decir, uno de cada cuatro connacionales sufre de hambre”.

Por si fuera poco, dijo el dirigente de UNIMOSS, este año, nuestro país se convirtió en el mayor importador de maíz del mundo pue se estima la compra de 17 millones de toneladas de este grano del cual ya no solamente es amarillo sino también blanco para consumo humano.

De esta manera ya desbancó a China en este rubro. Es decir, el país de donde es originario el maíz no consume su propio maíz, sino que debe traerlo de Estados Unidos”, precisó Javier López Macías.

Igualmente los pequeños productores deben enfrentar la problemática de recibir un bajo pago por su cosecha de maíz que ronda los 3,800 pesos la tonelada, no obstante que con la depreciación del peso frente al dólar no se iguala la cotización del grano en la Bolsa de Chicago.

Por si fuera poco, dijo Javier López Macías, la situación es grave en el país porque sí hay alimentos, pero no están bien distribuidos o se desperdician. En México se desperdician alrededor de 30 mil toneladas de alimentos en toda la cadena de producción y comercialización.

Mencionó, en entrevista, que hoy lunes 17 de octubre de 2016, la Oficina Regional de la FAO en Santiago de Chile presentará el informe global “El Estado mundial de la agricultura y la alimentación”, durante el acto regional de conmemoración del Día Mundial de la Alimentación.

Hizo un Llamado urgente al Estado Mexicano para adoptar una estrategia eficaz de combate al hambre en el país, pues además se enfrenta desnutrición y obesidad infantil.

A pesar de los avances en materia de desnutrición infantil que se han experimentado en los últimos años, lo cierto es que las cifras siguen siendo alarmantes en algunos sectores de la población. En el grupo de edad de cinco a catorce años la desnutrición crónica es de 7.25% en las poblaciones urbanas, y la cifra se duplica en las rurales. El riesgo de que un niño o niña indígena se muera por diarrea, desnutrición o anemia es tres veces mayor que entre la población no indígena.

La otra cara de los problemas de nutrición lo conforma la obesidad infantil, que ha ido creciendo de forma alarmante en los últimos años. Actualmente, México ocupa el primer lugar mundial en obesidad infantil, y el segundo en obesidad en adultos, precedido sólo por los Estados Unidos. Problema que está presente no sólo en la infancia y la adolescencia, sino también en población en edad preescolar.

Datos del ENSANUT (Encuesta Nacional de Salud y Nutrición) indican que uno de cada tres adolescentes de entre 12 y 19 años presenta sobrepeso u obesidad. Para los escolares, la prevalencia combinada de sobrepeso y obesidad ascendió un promedio del 26% para ambos sexos, lo cual representa más de 4.1 millones de escolares conviviendo con este problema.

La principal causa a la que se apunta son los malos hábitos en la alimentación, que acaban desembocando en una prevalencia del sobrepeso de un 70% en la edad adulta.

A largo plazo, la obesidad favorece la aparición de enfermedades tales como diabetes, infartos, altos niveles de colesterol o insuficiencia renal, entre otros. Actualmente, la diabetes es el mayor problema al que se enfrenta el sistema nacional de salud: es la principal causa de muerte en adultos, la primera causa de demanda de atención médica y la enfermedad que consume el mayor porcentaje de gastos en las instituciones públicas.

“Es muy fácil ir a la tienda de la esquina y comprarles un refresco y unas papas fritas para calmar el hambre. Pero creo que los adultos debemos enseñarles que lo óptimo es volver a nuestras raíces y comer alimentos sanos producidos por nosotros mismos”, concluyó.