Por: Redacción

Las designaciones de Arely Gómez y Raúl Cervantes Andrade como titulares de la Secretaría de la Función Pública (SFP) y la Procuraduría General de la República (PGR), respectivamente, son parte del mismo espectáculo orquestado por el Presidente Enrique Peña Nieto para tratar de convencer a los mexicanos de que su gobierno sí combate la corrupción, aunque ello de ninguna manera sea cierto, afirmó el diputado Rogerio Castro Vázquez.

El Presidente de la Comisión de Transparencia y Anticorrupción de la Cámara de Diputados, subrayó que la verdadera intención de los nombramientos de la extitular de la PGR y el ahora senador con licencia indefinida, es para que sigan en la impunidad los actos de corrupción que cometen los funcionarios del Ejecutivo Federal y sus cercanos.

En entrevista, al finalizar la Novena Reunión Ordinaria de dicha Comisión, recalcó que los movimientos realizados por Peña Nieto no solamente son a modo, sino que lamentablemente con personajes cuya ineficiencia e incapacidad ha sido demostrada a todas luces, además de que han incurrido en conflicto de intereses.

“Ahora resulta que Arely Gómez va a investigar conflictos de intereses en la Secretaría de la Función Pública, cuando ella tiene un conflicto de interés con el caso de la empresa Oceanografía. Eso es totalmente incongruente”, reclamó el integrante del Grupo Parlamentario de Morena.

Expresó que el trabajo realizado por Arely Gómez en la PGR dista mucho qué desear, y que dos botones de muestra son la fuga del narcotraficante Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”, del Penal de Alta Seguridad del Altiplano, y los escasos resultados en las investigaciones sobre la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural “Raúl Isidro Burgos”, de Ayotzinapa.

Por ello, añadió, está entredicho desde ya su labor como Secretaria de la Función Pública, toda vez que realmente no se podrá combatir la corrupción e impunidad de los servidores públicos, en particular de los de primer nivel.

“El desempeño de la ahora exprocuradora es lamentable, y no creo que en la Secretaría de la Función Pública haga un buen trabajo. Enrique Peña Nieto sólo está reciclando a sus secretarios y no aporta ningún cambio sustancial en la lucha contra la corrupción”, aseveró.

Castro Vázquez consideró que para lograr un buen cambio, primero se tendrían que revisar todos los casos de desvíos administrativos dentro del Gobierno Federal, así como de todos los gobernadores, ya que ninguno garantiza honestidad en sus funciones.