Por: Redacción/

El diputado Federico Döring Casar (PAN), presidente de la Comisión de Planeación del Desarrollo del Congreso de la Ciudad de México, advirtió que si las propuestas ciudadanas en materia de gestión integral de riesgos, resiliencia y sustentabilidad hídrica, entre otras, no se contemplan en la futura Ley de Planeación para la capital, “sería un daño irreparable”, pues el Gobierno de la Ciudad impondría su visión en torno al crecimiento urbano.

Durante el Foro Consultivo Ciudadano para Análisis y Discusión de los Contenidos de las Propuestas de Proyecto de Dictamen de la Legislación en Materia de Planeación, el legislador citó el apartado C del artículo XV de la Constitución de la Ciudad de México, el cual le otorga a la Jefatura de Gobierno una afirmativa ficta para hacer su propio programa de desarrollo y ordenamiento territorial, el cual, en el pasado, el Gobierno de la Ciudad nunca la tuvo.

“Los programas de desarrollo urbano nunca tuvieron el beneplácito de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, porque no había consenso con la ciudadanía, y ni aunque un partido político tuviera ese consenso vecinal se llegaron a aprobar. Por ende, está afirmativa ficta establece que lo que mande el gobierno a propuesta del Instituto de Planeación, sino lo rechaza el Congreso capitalino, se tendrá por aprobado en seis meses, con lo cual surge la posibilidad de tener propuestas mal hechas, insuficientemente bien planeadas y omisas en temas como gestión integral de riesgos, sustentabilidad hídrica, resiliencia y otros”, explicó el legislador.

Por ello dejó en claro que ingresar nuevos temas propuestos por la población garantiza que la planeación tomará en consideración tópicos que han preocupado y que nunca fueron tomados en cuenta por el Gobierno de la Ciudad, por lo que es una suerte de póliza de seguro contra la imposición de la visión de crecimiento de la ciudad a partir de la figura de la afirmativa ficta.