Por: Redacción/

Resultado de 36 visitas de supervisión, 231 de difusión y sensibilización y 48 temáticas –315 en total—
realizadas en el primer semestre de este año por el Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura
(MNPT) a diversos lugares de privación de la libertad federales, estatales y municipales, se confirmó la
persistencia de factores de riesgo que pueden derivar en maltrato o tortura contra las personas internas.

Tales factores van desde sobrepoblación y hacinamiento, deficiencias en higiene y mantenimiento de
las instalaciones, encierro prolongado en celdas, hasta carencia de presupuesto para alimentos, fugas
de agua, humedad en paredes, falta de iluminación y ventilación adecuada, e insuficiente personal
técnico para la reinserción social de las personas privadas de la libertad.

Comprobó la falta de personal de seguridad y custodia; falta de actividades laborales remuneradas;
pocas actividades educativas y deportivas; las celdas destinadas a internos con alguna discapacidad
no cuentan con modificaciones y adaptaciones para facilitar el acceso, y donde hay presupuesto para
alimentos, éstos fueron deficientes en calidad y cantidad.

En estas visitas, el Mecanismo desarrolló campañas de sensibilización y difusión para prevenir dicho
flagelo, y entregó materiales como 21,163 trípticos, 9,848 posters, 188 libros y 50 juegos didácticos.
En ocasión del Día Internacional en Apoyo de las Víctimas de la Tortura –26 de junio—, el MNPT reitera
que la prevención de la tortura es una de las obligaciones internacionales que asumió el Estado
mexicano, derivada de la ratificación de la Convención contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles,
Inhumanos o Degradantes, incluyendo su Protocolo Facultativo, así como de la Convención
Interamericana para Prevenir y Sancionar la Tortura.

En los artículos 19, 10 y 22, constitucionales se prohíben la tortura y los malos tratos en la detención y
en el proceso penal, y su empleo como sanción o pena, mientras que la Ley General para Prevenir,
Investigar y Sancionar los Delitos en Materia de Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanas o
Degradantes, del 26 de junio de 2017, establece como uno de los ejes de la prevención desarrollar
campañas de sensibilización y difusión para prevenir su empleo hacia toda persona, especialmente
hacia quienes están privados de la libertad.

Además, promueve la participación de las organizaciones de la sociedad civil en el desarrollo integral
de sus actividades a través del Comité Técnico del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura;
publica anualmente un informe con el diagnóstico del MNPT sobre la situación que impera en la
Federación y en cada entidad federativa en materia de tortura.

En 1997, la Asamblea General de las Naciones Unidas decidió proclamar el 26 de junio Día
Internacional en Apoyo de las Víctimas de la Tortura, luego de condenar esa práctica por ser uno de
los actos más aborrecibles que los seres humanos cometen contra sus semejantes, y con el objetivo
de erradicar totalmente el flagelo y aplicar la mencionada Convención que entró en vigor el 26 de junio
de 1987, aprobada por la resolución 39/46.