Por: Ximena Islas Guerra

El Secretario Técnico de la comisión de Atención al Desarrollo de la Niñez, Óscar García Cervantes informó sobre la necesidad de establecer un programa para detectar y monitorear a las familias que tengan posibilidades de riesgo de suicidio infantil y posteriormente se canalicen a las instituciones respectivas para su atención y tratamiento.

La propuesta surge con las cifras donde anualmente, aproximadamente 150 niños entre los 5 y 14 años de edad deciden suicidarse por diversos trastornos, principalmente  psiquiátricos y que la problemática se da con mayor frecuencia en la Ciudad de México, Colima y Baja California.

El funcionario señaló que, de acuerdo con el Consejo Ciudadano de la Ciudad de México, el año pasado se detectaron 349 casos en que los niños entre 6 y 14 años presentaron síntomas de suicidio (como episodios de tristeza y ansiedad, autolesiones y trastornos del sueño) a causa del acoso escolar.

Debido al intento de suicidio o a la ejecución acto por parte de menores de edad, García Cervantes reconoció que es necesaria mayor atención psicológica, además de la brindada por el DIF o por alguna otra institución.

En relación, detalló que las niñas son quienes más intentan quitarse la vida, “entre ellas lo más común es la ingesta de pastillas, antidepresivos, estimulantes o fármacos que tengan a su alcance, también optan por cortarse las venas”. Mientras que los niños recurren al uso de armas de fuego, ahorcamiento o lanzarse de lugares altos.

Finalmente recomendó a los padres de menores que presten atención al comportamiento de sus hijos porque es una medida para prevenir cualquier intento de suicidio.