Por: Carolina Carrasco

La Misión de Observación de la Consulta Indígena Maya, dictada por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, aseguran que las autoridades no han dado las condiciones necesarias para la discusión de la consulta acerca de la siembra ilegal de soya genéticamente modificada se lleve de manera puntual y en un marco de respeto.

Esta Misión de Observación reprueba la actuación de la Secretaria de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA), a la Comisión Intersecretarial de Bioseguridad de los Organismos Genéticamente Modificados (Cibiogem) y la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Derechos Indigenas, autoridades responsables de la organización de la consulta, y quienes pareciera que están apoyando los intereses de las empresas interesadas en la siembra de soya modificada genéticamente.

Narraron que durante la segunda sesión de la fase de consulta correspondiente a la de “Acuerdo previos”, realizada los días 30 de junio y 1 de julio en los municipios de Hopelchén y Tenabo respectivamente, en Campeche, se detectaron graves irregularidades que violentaron los principios establecidos por la SCJN.

En la sesión de Holpechén, desde tiempo antes de la hora convocada, la sala dispuesta para dicho fin se encontraba llena por cien agrícolas y productores a favor de la siembra de soya genéticamente modificada, impidiendo el acceso a los representantes de las 31 comunidades que debían ser consultadas.

Las autoridades optaron por realizar dos reuniones en espacios paralelos, a pesar de la solicitud de los representantes indigenas de suspender la sesión por no haber las condiciones mínimas de seguridad y respeto, pues durante la sesión se hacían constantes descalificaciones a los representantes mayas.

Además, en la sala donde se encontraban los agrícolas a favor de la siembra se presionaba para que se firmara un acta que permitiera la siembra de soya de manera inmediata, amenazando incluso a cerrar los accesos hasta lograr sus objetivos. Acordaron, debido a todas estas irregularidades, continuar la fase de acuerdos hasta el 15 de octubre.

Por su parte, en la sesión de Tenabo, el 1 de julio, el asesor representante a comunidades mayas leyó una carta donde informó que debido al antecedente ocurrido en Hopelchén, y una reunión no programada con productores de soya en Campeche, por parte de SAGARPA, solo se recibiría el programa de trabajo de la consulta y se analizaría, postergando la fase de acuerdos para la fecha programada en octubre por sus compañeros de Hopelchén.

“Las autoridades toleraron completamente esta situación de falta de confianza, de hostilidad, e incluso exacerbaron éstas, como con algunas declaraciones del delegado de SAGARPA en Campeche, que atribuía la suspensión del permiso de siembra de soya a las comunidades de donde provienen los quejosos” puntualizó un representante de esa Misión de Observación.

Denunciaron además que algunos participantes se transportaron en camionetas de empresas distribuidoras de semillas y herbicidas ligadas a Monsanto. Hicieron un llamado a las autoridades para conducirse con pleno apego a los principios de buena fe, a respetar la toma de decisiones de acuerdo a los usos y costumbres de las comunidades mayas, y a no mal informar sobre la consulta, y lo que ésta significa.