Por: Redacción/

La Secretaría de Salud (SEDESA) de la Ciudad de México, a través de la aplicación del Cuestionario para medir conductas alimentarias de riesgo, que se aplica en centros de salud impulsa la detección y atención oportuna de trastornos alimenticios como la anorexia y bulimia.

La población más frecuente a sufrir de estos trastornos son las niñas y jóvenes de 12 a 25 años. Estudios recientes indican que el 95% de los casos que padecen anorexia son mujeres y solo el 5% hombres, mientras que en la bulimia 90% son mujeres y 10% hombres.

La anorexia y bulimia se manifiestan por el rechazo a los alimentos con el objetivo de perder peso, además se acompaña de acciones como inducción del vómito, preocupación constante por la comida, utilización de laxantes, diuréticos y fármacos, ejercicio físico excesivo, distorsión de la imagen corporal, retraso del periodo menstrual, pérdida de interés e impotencia sexual en los varones.

“Padecí anorexia, no estaba conforme con mi cuerpo, quería cambiarlo. No tenía la noción de lo que me fuera a pasar. Yo no les dije nada a mis papás hasta que ellos se dieron cuenta, estas enfermedades te consumen y puedes llegar a perder la vida”, comentó Carlos Gutiérrez de 15 años.

Carlos padeció anorexia y bulimia desde los ocho años, pesaba 36 kilos y llegó a pesar 19 kilos, ese fue su peso más bajo. Lleva cinco años en tratamiento en el Centro de Salud T-III Dr. Atanasio Garza Ríos ubicado en la delegación Cuauhtémoc, perteneciente a la red de unidades de los Servicios de Salud Pública de la CDMX.

“Nosotros identificamos este caso como grave, no solo estábamos lidiando con un padecimiento si no con dos. Carlos ha salido adelante con las terapias y los medicamentos, podemos decir que vamos a la mitad del tratamiento, no se han tenido recaídas del paciente y eso es lo más importante del proceso, la familia se ha comprometido junto con él, tienen muy buena actitud y seguimos trabajando”, expresó la psiquiatra Montserrat Pérez, adscrita a los Servicios de Salud de la CDMX.

Algunas condiciones que se pueden identificar en los pacientes con estas conductas son: peso, talla, piel seca, uñas quebradizas, caída del cabello y afectación dental; así como preocupación excesiva por el peso, distorsión de la imagen, toma de laxantes y actividad física exagerada.

En caso de salir positivo al diagnóstico en alguna conducta alimentaria de riesgo, los pacientes son referidos a las Unidades Especializadas Médicas (UNEME), donde reciben tratamiento por parte de especialistas, nutriólogos y psicólogos.

De ser necesario, son canalizados a unidades de tercer nivel de atención con los cuales la SEDESA mantiene convenios de colaboración a favor de la población de la CDMX, como la Clínica de la Conducta Alimentaria del Instituto Nacional de Psiquiatría Dr. Juan Ramón de la Fuente; la Clínica de Obesidad y TCA del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Dr. Salvador Zubirán y la Clínica de los TCA del Instituto Nacional de Salud Dr. Federico Gómez (Hospital Infantil).

Para mayor orientación médica y psicológica, sobre cómo identificar y a dónde acudir para la atención de estos trastornos alimenticios, la Sedesa cuenta con el centro de atención telefónica Medicina a Distancia 5132 0909.