• La remera destacó su ardua preparación rumbo a su segunda experiencia olímpica; realizará un campamento en Japón previo al arranque de la magna justa.

Por: Redacción/

Hace 16 semanas, Río de Janeiro, Brasil, fue el escenario donde Kenia Vanessa Lechuga Alanís, logró el boleto para lo que será su segunda experiencia olímpica, esto en la Regata Continental de Clasificación donde conquistó el primer lugar de la Final A, lo que significó una satisfacción personal y deportiva, “me gusta demostrarme de lo que soy capaz”, comentó en entrevista con la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE).

“Cuando obtuve la plaza estaba muy contenta, es importante ir cumpliendo ciertas metas que te trazas, pero siempre poner una siguiente; para mí no dura mucho alguna competencia en mi mente, sino pienso que más quiero lograr porque mi principal objetivo en la vida es ser la mejor del mundo y creo que paso a pasito vamos logrando pequeñas metas para llegar a lo más grande”, aseguró.

Para Lechuga Alanís, Tokio será una oportunidad de revancha, pues para esta edición, que se encuentra a un mes de distancia, destacó, tiene una sensación de más fortaleza, experiencia y crecimiento, luego de cinco años de su debut olímpico en Río 2016, donde culminó en el lugar 12.

“Me siento muy emocionada, ya falta muy poco tiempo para que inicien los Juegos y tengo más experiencia que antes, me siento mucho más fuerte mental y físicamente también se nota en el gimnasio, en los tiempos que cada vez estoy mejor; cada día cuenta, cada entrenamiento y competencia es una experiencia más y definitivamente ahora y para Tokio estoy en la mejor versión de Kenia Lechuga”, dijo.

La disciplina y constancia fueron atributos que la regiomontana, medallista de oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Barranquilla 2018 y en los Juegos Panamericanos Lima 2019, destacó en su preparación, pues pese a las dificultades ocasionadas por la pandemia por covid-19, destacó, no bajó los brazos para alcanzar su objetivo e incluirse en la delegación mexicana para el certamen nipón.

“Me gusta mucho la manera en la que trabajo, soy demasiado disciplinada, me esfuerzo mucho en cada entrenamiento, solo falta experiencia, tiempo y como he venido haciendo las cosas creo que está muy bien porque en la pandemia trabajé muy duro a pesar de que no podíamos remar todo el tiempo, buscaba la manera de correr, de subir montañas, de mantenerme activa”, comentó.

“Justo para estos Juegos se notó quién siguió entrenando, a pesar de todas las adversidades, quién siguió buscando la manera de poder mantener el rendimiento para buscar la clasificación y el hecho de estar ahí es un regalo para todos, una muestra de seguir adelante y aquí estamos demostrando que se puede”, agregó.

 “Estoy ansiosa por ver mi rendimiento en Juegos Olímpicos”

Previo al arranque de la justa veraniega, Kenia Vanessa Lechuga sumó actividad en la Copa del Mundo II en Lucerna, Suiza, “nos desempolvarnos un poco”, comentó al considerar esta participación, que reunió a la élite mundial de la disciplina, parte de su entrenamiento internacional.

“Por la pandemia no habíamos competido nada, pero no hicimos tanta velocidad como nos vamos a preparar para Juegos Olímpicos, ahora estamos empezando a hacer más velocidad, generalmente hacemos resistencia, pero empezamos a probar un poquito como vuela el bote, también hay que mantener la concentración, la salud, la alimentación, lo mental, que todo esté perfecto para ese día, que nada quede en mis manos”, aseguró.

La atleta, que entrena en la pista de Cuemanco, al sur de la Ciudad de México, adelantó que antes del debut en Tokio 2020, donde el remo entrará en acción el 23 de julio en el Canal Sea Forest, ubicado cerca del centro de la capital nipona, realizará un campamento previo de dos semanas en Fujiyama.