Por: Víctor Cruz/

Las “Chivas rayadas del Guadalajara” obtuvieron su primera victoria del Torneo al doblegar 2-0 a los Tigres en el juego correspondiente a la jornada dos del Apertura 2019, cabe destacar que es el segundo triunfo en liga desde que Tomas Boy llegó al banquillo.

El primer tiempo arrancó con emociones, apenas al minuto nueve se escuchó el grito de gol en el Estadio Akron, en un tiro de esquina Antonio Briseño corrió a primer palo y sacó un testarazo que no pudo atajar Nahuel Guzmán, poniendo de esa manera el primer tanto del encuentro.

Después del gol siguieron las malas noticias para el equipo que San Nicolás de los Garza, al minuto 23 Carlos “El Titán” Salcedo cometió una entrada sobre Michael Pérez, que fue consecuencia para dejar a su equipo con un hombre menos.

Instantes después de la expulsión las Chivas pudieron aumentar la ventaja, Oswaldo Alanís remató solo en el área de los felinos, pero testarazo se fue desviado. Los Tigres intentaron nivelar el encuentro, pero no generaron muchas jugadas de peligro.

En la parte complementaria hubo más oportunidades de gol, al minutito 57 se representó una de las oportunidades más claras para los pupilos de Ricardo Ferretti, Jürgen Damm debordó por la banda izquierda y mando un centro como con un guante, para que el delantero francés, André-Pierre Gignac metiera el empate, pero una gran atajada de Antonio Rodríguez dejó con las ganas al artillero de convertirse en el máximo goleador del equipo del norte.

Instantes más tarde las acciones se calentaron en las bancas, el mismo Gignac se enfrascó en un pleito de palabras con el entrenador Tomas Boy, situación por la que “El Jefe” se fue expulsado del terreno de juego, no sin antes gritarle al “killer” europeo que él era el número uno, hay que recordar que el estratega del “Rebaño” es un histórico de los Tigres.

Ya cuando el tiempo agonizaba y los dirigidos de Ferretti estaban al abordaje las “Chivas” pusieron números definitivos al encuentro, Alan Pulido cayó dentro del área, situación que fue marcada como pena máxima, el mismo delantero tomó la de gajos y desde los once pasos mandó la número cinco a las redes, para así finiquitar el encuentro.