Por: Redacción

Con un íntimo show a media luz, la cantante y compositora canadiense Leslie Feist, mejor conocida como Feist, cautivó a los asistentes al Teatro de la Ciudad Esperanza Iris con su nueva y reluciente grabación titulada simplemente Pleasure, además de presentar temas que la han colocado como una de los talentos femeninos más destacados en la escena musical del mundo, gracias a su sinceridad y entrega en cada álbum y concierto.

Ataviada con un traje de una sola pieza color rosa mexicano, Feist saludó emocionada a sus fieles seguidores quienes la esperaron cinco años. La homónima y estridente “Pleasure” rompió un silencio que duró más de lo esperado en tierras mexicanas, seguida de la sobrecogedora “I Wish I didn’t Miss You” y su letra que le canta a aquellos sentimientos que muchas veces no sabemos cómo exteriorizar.

Cargado de nostalgia, tristeza y melancolía inenarrables, Pleasure nos muestra una faceta poco explorada por la compositora originaria de Amherst, Canadá; un trabajo donde los límites emocionales, la soledad y los secretos más recónditos protagonizan la lírica de “Get not High, Get not Low” y en especial “Lost Dreams”, reflexión sobre los sueños que creemos perdidos, pero que siempre están latentes y pueden hacerse realidad.

Uno de los momentos claves de la noche en el Teatro de la Ciudad fue cuando la nominada al Grammy ─y alguna vez miembro de Broken Social Scene─, interpretó la delicada pero poderosa “Any Party”, donde la cantante asegura amorosamente que “dejaría cualquier fiesta por estar con esa persona especial”, aquella que nos roba algo más que atención.

El viaje por los sentimientos descarnados de Feist continuó con el feeling explosivo y sorpresivo de “A Man is not his Song”, y poco a poco la gente fue despegándose de los asientos color carmesí del recinto de Donceles.

“I have a crush on your language”, dijo emocionada Feist a su público que buscaba tenerla aún más cerca, justo antes de arrancarse con “The Wind”, track caracterizado por la melodiosa voz de Feist, que flota entre las sutiles notas del sintetizador de la canadiense, produciendo una atmósfera altamente contagiosa gracias a sus muy especiales vocalizaciones y armonías.

Al igual que “Pleasure”, “Century”, grabada originalmente con Jarvis Cocker (ex líder de Pul), exhibe potentes riffs con una Feist más desenfrenada. Es el lado salvaje de la canadiense, la parte maligna, el lado oscuro que nunca nos abandona; “Baby Be Simple” pone el contrapunto musical con una fascinante facilidad para transmitir emociones con tan sólo una guitarra y voz desnuda, sin adornos innecesarios.

Luego de las remembranzas R&B que provocó “I’m not Running Away” y las cadenciosas notas jazzísticas de “Young Up”, track que cierra Pleasure, la canadiense agradeció sin parar las muestras de cariño del público. En seguida, los clásicos de Feist inundaron el recinto emblemático; “A Commotion”, incluida en Metals (2011), arrancó lo gritos de un abarrotado Teatro de la Ciudad y que conectó de inmediato con el nuevo clásico moderno “My Moon, my Man”, tema extraído de The Reminder, su mejor álbum a la fecha, que fue recibido entre gritos y aplausos que parecían no tener fin, y se prolongaron aún más con “Sea Lion Woman”.

Los éxitos siguieron con “Here Come you Never Go There” y “The Bad in Each Other”, pertenecientes a Metals, predecesor de Pleasure, entre los cuales existen 6 largos años de distancia en los que la cantautora ha evolucionado hacia una propuesta que claramente abrevó de las aguas del indie-folk, pop-rock y alt-pop que atestiguaron el crecimiento de Feist como un referente femenino en la difícil industria musical, rompiendo barreras y abriendo veredas.

“Please stand up and shake your bodies, I want that unique vibe of Mexico. Please come over and sing with me”, dijo Feist a sus seguidores que de inmediato se arremolinaron frente al proscenio para sentir la adrenalina de tenerla a unos cuantos centímetros, acto seguido “Let it Die” estalló entre gritos, bailes frenéticos y seguramente distantes recuerdos amainados por el tiempo transcurrido.

Después de las electrificantes interpretaciones y de un pequeño descanso, Feist regresó al escenario entre eufóricos fans y aplausos que llenaron cada recoveco del recinto perteneciente a la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, con su más sonado sencillo “Mushaboom”, que transportó a los asistentes al lejano 2004, cuando fue editada como parte de Let It Die y una cascada de recuerdos cayó sobre los asistentes.

“Thanks you for being so wonderful to us”, expresó la cantautora minutos antes de que retumbara en el recinto “1234”, estrenada a casi 10 años, y que parecía haber sido escrita apenas hace unos meses; así, la comunión artista-público quedó sellada por el climático final de la velada.

Feist se presentará de nuevo hoy lunes primero y el martes 2 de mayo, a las 20:30 horas en el Teatro de la Ciudad “Esperanza Iris”, ubicado en Donceles 36, Centro Histórico, cerca del Metro Allende.

Boletos en taquilla del recinto y en el sistema Ticketmaster. Localidades 460 y 350 pesos. Aplica 50% de descuento a estudiantes de nivel básico, maestros, personas con discapacidad, así como trabajadores de gobierno y adultos con credencial vigente del INAPAM.