Por: Redacción/

La Función Pública será un ente de vigilancia y sanción por la vía administrativa, y se asegurará de proveer los elementos necesarios a la justicia para que se castigue también en el ámbito penal a quienes cometan delitos vinculados a la corrupción. “Seremos, y nos compromete a ser, una especie de ministerio público de la probidad”, expuso Irma Eréndira Sandoval Ballesteros, durante su participación en la clausura del Foro Nacional para la construcción del Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024.

En el evento, encabezado por el Presidente Andrés Manuel López Obrador, Sandoval Ballesteros detalló que la esencia de la Función Pública es ser un órgano preventivo para promover el buen uso de los recursos y la prestación eficiente de los servicios públicos. Al mismo tiempo, la Secretaría será un instrumento efectivo de sanción que actúe de manera inmediata “cuando se presenten las acciones indebidas por partes de los servidores públicos”.

Agregó que la visión de la Secretaría de la Función Pública para 2024 es que la corrupción se castigue, el derroche se elimine, la ineficacia se termine, la fiscalización de los recursos públicos se ciudadanice, la denuncia ciudadana se proteja, la transparencia se garantice y se generen ahorros que puedan orientarse a satisfacer los objetivos del desarrollo nacional.

Asimismo, explicó que la misión de esta Secretaría será instaurar una nueva ética de trabajo en el servicio público y un nuevo equilibrio organizacional que auspicie la honestidad, la eficacia, la profesionalización y la transparencia en estricto apego a la normatividad imperante.

Refirió que es necesario reestablecer la confianza de la ciudadanía en el servicio público, y enfatizó que la Función Pública será la dependencia encargada no sólo de la prevención y sanción de las conductas contrarias a la normatividad, sino de la planeación e implementación de mejoras a la gestión pública, especialmente en aquellas oficinas que tengan contacto con los ciudadanos y compartan la obligación de auspiciar los derechos fundamentales de la sociedad.

Sandoval Ballesteros también informó que un eje transversal para combatir la corrupción será la austeridad republicana, concepto que recoge lo mejor de la historia de nuestro país y se aleja de la aplicación neoliberal de la austeridad funcional que menoscaba a los gobiernos y pisotea los derechos sociales. “El servicio público tiene razón de ser únicamente si es útil a la protección de los derechos fundamentales y si prevalece el interés general”, agregó.

La implementación de la próxima Ley de Austeridad Republicana de Estado será de la mayor importancia para alcanzar estos objetivos. Un gobierno austero es aquel que no malgasta en cuestiones vanas el dinero público, sino que destina la mayor parte de los recursos a los propósitos reales de desarrollo que emergen del mandato popular.