Por: Redacción/

El doctor Luis Niño de Rivera y Oyarzabal, investigador del Instituto Politécnico Nacional, consideró que con la nueva reforma educativa que analizará el Senado en los próximos días, el Congreso tiene la oportunidad de cumplir con el reto de modernizar la educación, a través de legislaciones secundarias que permitan que las instituciones educativas incluyan en sus planes de estudio materias que incorporen a las nuevas tecnologías.

Al mismo tiempo, se manifestó en favor de que las universidades y el Instituto Politécnico Nacional transformen la estructura rígida en la parte docente, para pasar a un modelo transversal de educación, donde la ciencia y la innovación jueguen un papel preponderante para que los profesores no sólo den sus cursos en las aulas sino, también en la red.

Luis Niño de Rivera y Oyarzabal, es investigador del Laboratorio de Visión Artificial en la sección de Estudios de Posgrado e Investigación de la Escuela Superior de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (ESIME), Unidad Culhuacán, ha encabezado varias investigaciones, de esa institución.

La más reciente es un estimulador eléctrico transcorneal para revertir, mediante estímulos eléctricos aplicados en la córnea, los efectos de la degeneración macular. Problema que destruye lentamente la visión central y aguda, lo que dificulta la lectura y la visualización de detalles finos. 

Durante el Primer encuentro: El Instituto Politécnico Nacional frente a la Cuarta Transformación, que encabezaron los senadores Salomón Jara y Rubén Rocha Moya, Luis Niño de Rivera consideró que en el nuevo modelo educativo debe contemplarse la capacitación continua de los maestros, pero, sobre todo debe ponderar los derechos de los jóvenes y los menores por encima de los intereses de algunos grupos como la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación.

 Lo que tiene que hacer el Estado y el Congreso, advirtió, es definir la ruta para fortalecer las áreas estratégicas y fomentar tecnología de alto nivel. Si no nos transformamos, en 30 años estamos liquidados, y como ejemplo dijo que la robotización en Estados Unidos producirá 50 millones de desempleos en los próximos 10 años.

 Académicos del Instituto Politécnico Nacional que también participaron en el foro coincidieron en que es necesario modernizar la educación en México, enfocándola a la ciencia y la tecnología pues de lo contrario, en 30 años el país está condenado al fracaso.  

 Ante este panorama, los legisladores manifestaron su compromiso para diseñar y discutir en Parlamento Abierto las leyes que habrán de realizarse para complementar la reforma educativa.  

El presidente de la Comisión de Educación, Rubén Rocha Moya, mencionó que los legisladores están preparados y dispuestos a enfrentar los retos y trabajarán en los meses de receso, para que el próximo periodo ordinario de sesiones se discutan y aprueben las leyes secundarias de la nueva reforma educativa.  

Coincidieron con el académico en el sentido que, sólo incorporando ciencia, tecnología e innovación, nuestro país podrá alcanzar su máximo desarrollo, su independencia y le permitirá generar progreso, abatir la pobreza y las desigualdades