Por: Redacción

La senadora Rosa Adriana Díaz Lizama presentó una iniciativa de reformas constitucionales para reducir el número de integrantes del Congreso de la Unión, de 500 a 400 diputados y de 128 a 96 senadores, eliminando 100 diputados de representación proporcional y 32 senadores de lista nominal.

“El Congreso de la Unión puede funcionar no solo bien, sino incluso mejor si se disminuye el número de sus integrantes. Esta disminución provocaría impactos positivos en toda la cadena del proceso legislativo e incluso en términos presupuestarios”, afirmó la senadora por Yucatán.

Díaz Lizama explicó que el sistema de representación proporcional, conocido como “plurinominal”, se estableció para que los partidos pequeños pudieran estar representados en el Poder Legislativo.

“Las condiciones políticas del sistema de partidos son muy distintas de las que dieron origen a esta modalidad de elección. Ya no hay un partido político con absoluto dominio, sino fuerzas políticas plenas que consiguen ganar elecciones por sí mismas”, afirmó.
La iniciativa de la senadora panista propone reformar los artículos 52, 53, 54 y 56 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.

“La disminución del número de legisladores en la figura plurinominal es necesaria, toda vez que este sistema ya cumplió con los propósitos que en principio dieron origen a su creación, al existir hoy una mayor representación en el Congreso por parte de los partidos más pequeños, que por sí mismos no podían ganar gran cantidad de circunscripciones electorales”, indicó.

Expuso que la reducción del número de integrantes en las cámaras de Diputados y Senadores tiene los siguientes propósitos:

• Eficiencia: la disminución del número de diputados y senadores agilizará diversos trámites que requieren un proceso individual de cada uno en la toma de decisiones parlamentarias. La integración de las comisiones de trabajo legislativo reflejará la disminución de legisladores, lo que permitirá mejores sesiones de trabajo.

• Acuerdos políticos: la unificación de criterios es más sencilla en grupos de menor composición. La disminución de legisladores permitirá mejores entornos de negociación y, por tanto, facilitará alcanzar acuerdos y constituir mayorías parlamentarias, que adicionalmente dotarán de legitimidad a las reformas aprobadas en el Poder Legislativo.

• Austeridad: la reducción de legisladores implicará la disminución de costos en el Poder Legislativo. Si bien es un beneficio secundario a las funciones legislativas, responde de forma inmediata a las políticas de austeridad que en la situación económica actual debe de prevalecer en la vida pública del país.

“Requerimos un Poder Legislativo que atienda a las exigencias de la ciudadanía que considera que es muy costoso tener un Congreso integrado por tantos diputados y senadores y que, al ser tan numeroso, resulta difícil que los legisladores logren ponerse de acuerdo sobre el trabajo a realizar”, dijo.

La iniciativa fue turnada a las comisiones unidas de Puntos Constitucionales, de Gobernación y de Estudios Legislativos Primera, para su análisis y dictaminación.