Por: Redacción/

El Congreso de la Ciudad de México solicitó a autoridades federales y capitalinas elaborar un programa que contenga acciones coordinadas para recuperar el Río Magdalena, en el tramo que corre a un costado de la avenida Universidad y que comienza en la calle de Francisco Sosa y pasa por los Viveros de Coyoacán con el fin de devolver a los coyoacanenses un espacio limpio, seguro y bien iluminado.

Los diputados de los partidos políticos representados en el órgano legislativo aprobaron un punto de acuerdo presentado por la legisladora de Morena, Leticia Varela Martínez, quien denunció que la ladera del Río Magdalena se encuentra llena de basura y lodo que expiden un olor insoportable para los habitantes de la zona.

“La suciedad que ahí se vierte es llevada por la corriente hasta un enmallado que debiera servir como una especie de coladera para evitar el ingreso de desechos al tramo entubado, sin embargo, el exceso de residuos sólo ha provocado severas inundaciones en una parte de los viveros de Coyoacán y las calles de Madrid, Bruselas y Avenida México”, agregó.

En este contexto, la diputada Varela Martínez exhortó a la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México y a la alcaldía de Coyoacán a que establezcan un operativo de vigilancia permanente para evitar que se tire basura y se cometan delitos en la ladera del río.

“La falta de iluminación y la poca o nula vigilancia ha propiciado que pese a los múltiples esfuerzos de los vecinos de Coyoacán por recuperar y mantener limpio este histórico espacio sin la ayuda de la autoridad, el lugar sea inseguro para transitar y las personas que por ahí caminan se vuelven blanco fácil para la delincuencia”, dijo.

Comentó que el tramo del Río Magdalena en cuestión se ubica a la altura del templo de San Antonio y el Puente de Panzacola a un costado de avenida Universidad, en la alcaldía de Coyoacán; Ahí, el río recupera su cauce abierto justo antes de fusionarse con el Río Mixcoac para después volverse el definitivamente entubado Río Churubusco, abundó.

Dijo que Coyoacán es un sitio con gran valor arquitectónico, cultural, histórico y por supuesto, también ambiental para la capital del país. “Probablemente el último paisaje capitalino que conserva intacta su composición arquitectónica es el Puente de Panzacola, en la calle que hoy conocemos como Francisco Sosa y el cruce de Avenida Universidad en Coyoacán, este puente cruza sobre el lugar donde el Río Magdalena recupera su cauce abierto y se encuentra acompañado del bellísimo templo de estilo barroco en honor a San Antonio de Padua”, afirmó.

De ello, comentó, se puede dar cuenta gracias al pintor Italiano Eugenio Landesio, quien en 1855 retrató en óleo un hermoso paisaje que hoy es patrimonio cultural de los mexicanos y que podemos ver en el Museo Nacional.

Leticia Varela recordó que los ríos que corren en la Ciudad de México fueron entubados a finales de la década de los años cincuenta, es decir, alrededor de ochenta y tres kilómetros se ocultaron bajo malla y concreto con el objetivo de evitar inundaciones por los constantes desbordamientos que provocaban las lluvias.

El otro objetivo, señaló, era mantenerlos limpios y libres de contaminación, aunque el objetivo no se logró en su totalidad. “Pocos tramos de estos ríos se encuentran en su estado original de cause abierto y eso ha sido suficiente para que aproximadamente el cuarenta por ciento del agua que deberían consumir los capitalinos se pierda, entre la contaminación y el mal estado de las tuberías de la red”, subrayó.

El punto de acuerdo para sanear el río contempla el llamado a diversas dependencias federales y locales como es el caso la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales; la Comisión Nacional del Agua; las Secretarías del Medio Ambiente, de Obras y Servicios y de Seguridad Pública de la Ciudad de México; el Sistema de Aguas capitalino y la alcaldía de Coyoacán.