Por: Omar Martínez

Un Juez de la Ciudad de México  sentenció con 13 años y cuatro meses de prisión, a una mujer que participó en el homicidio del director de cine, León Juan Salvador Serment Guerrero, con base en las pruebas presentadas por la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJ-CDMX).

El homicidio se cometió el 27 de agosto del año pasado en la delegación Álvaro Obregón, simulando que se trató de un asalto en contra el hijo de León Sermen; Benjamín Serment Rosique.

El  director de cine,  recibió 46 puñaladas durante la agresión, justo cuando regresaba con su hijo a su  domicilio, ubicado en la calle Luis Alconedo en la colonia Merced Gómez.

A partir de la indagatoria realizada por la PGJ y elementos de la Policía de Investigación (PDI), se reveló que Benjamín Serment y su novia, fueron los autores intelectuales de dicho delito, luego de una serie de contradicciones detectadas en la declaración de Benjamín, que dieron paso a la revisión del suceso a través de las cámaras de vigilancia de la Ciudad de México.

En las grabaciones, se ubicó a las personas (un hombre y la mujer sentenciada) que propinaron heridas con arma blanca a Serment Guerrero, para posteriormente, dirigirse a sucursales de banco ubicadas en las demarcaciones Tlalpan y Gustavo A. Madero donde retiraron dinero en efectivo de tarjetas de crédito propiedad del director de cine.

Con ello se determinó que los autores materiales del delito tenían previo conocimiento de la clave de las tarjetas; además, la ex esposa del cineasta, Adriana Rosique, declaró que su hijo presentó un comportamiento inusual la noche en que su marido fue apuñalado.

A menos de un mes del asesinato de León Serment, Adriana Rosique falleció en su domicilio, caso que sería investigado como suicidio, sin embargo, se esclareció, gracias a una cámara de vigilancia, que Benjamín ordenó el asesinato de su madre, luego de incurrir de nueva cuenta, en contradicciones, según informó el procurador Rodolfo Ríos Garza.

Benjamín fue ingresado al Reclusorio Norte junto con el segundo implicado en el asesinato de su padre, mientras que su novia ingresó al Reclusorio Femenil Santa Martha Acatitla, todos juzgados por el delito de homicidio calificado y en espera de una sentencia que podría alcanzar una condena de hasta 70 años de prisión.