Redacción

La Subsecretaria de Transporte de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), Yuriria Mascott Pérez dijo al participar en la XXI Reunión Nacional de Ingeniería de Vías Terrestres, organizada por la Asociación Mexicana de Ingeniería de Vías Terrestres (AMIVTAC),  que México, como todos los países beneficiarios de la globalización son también corresponsables de sus efectos en el medio ambiente.

“México, al igual que otros países, requiere equilibrar sustentabilidad e inclusión, expuso. Por ello, nuestro país ha conformado un marco jurídico que orienta la actuación de sociedad y gobierno hacia la búsqueda de un desarrollo sustentable e incluyente”.

Por ello, señaló que el Plan Nacional de Desarrollo establece explícitamente el objetivo de impulsar y orientar un crecimiento verde, incluyente y facilitador, el cual se complementa muy bien con el Programa Nacional de Infraestructura y el Programa Sectorial de Comunicaciones y Transportes.

Alcanzar un transporte sustentable e incluyente implica mejorar la infraestructura, establecer un marco regulatorio propicio y promover la innovación tecnológica, por lo que el Gobierno Mexicano ha conformado ya un gran portafolio que incluye diversas acciones, resaltó la Subsecretaria de Transporte.

Entre ellas están:

-Relanzar el tren de pasajeros como medio masivo de transporte.

-Impulsar proyectos clave de transporte masivo urbano.

-Promover el uso del ferrocarril en el traslado de carga, a través de un incremento en la velocidad y en la seguridad.

-Fomentar el cabotaje y el transporte marítimo a corta distancia, para impulsar como vía alterna el tránsito de mercancías.

-Promover la renovación de vehículos en el autotransporte de carga y pasaje, con énfasis en los pequeños transportistas, llamados hombres-camión.

-Fortalecer la verificación de condiciones físico-mecánicas, así como las especificaciones de pesos y dimensiones para el tránsito en las carreteras.

-Y promover el uso de combustibles alternos en el transporte, como el biocombustible para la aviación.

Al respecto, la Subsecretaria de Transporte destacó tres grandes proyectos que ha emprendido la SCT:

El Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), el Tren México-Toluca, y el Tren Ligero de Guadalajara.

Puntualizó que el NAICM está diseñado con una visión a 100 años, en su etapa inicial atenderá a 70 millones de pasajeros; hoy, a través de la terminal aérea capitalina en operación, se atienden aproximadamente a 35 millones.

El nuevo aeropuerto utilizará energía solar para generar su propia electricidad; aprovechará la iluminación natural y tendrá sistemas de calentamiento solar de agua.

Para regular y mitigar los riesgos de inundación, dijo, tendrá nueve cuerpos de agua que incrementarán la superficie de captación pluvial de mil 700 a dos mil 700 hectáreas; se triplicará la capacidad de almacenaje de 13 a 39 millones de metros cúbicos, y se aprovecharán mejor las aguas residuales con 145 kilómetros de nuevos colectores y la instalación de 24 plantas de tratamiento.

De esta manera se ahorrará el 30 por ciento del consumo de agua, apuntó.

Destacó que con el fin de evitar el daño ecológico por la deforestación en la construcción de esta terminal aérea, se llevan a cabo acciones de reforestación en aproximadamente dos mil hectáreas y se contempla la construcción de un bosque metropolitano de 670 hectáreas.

Al participar en la mesa de trabajo “Gestión Ambiental en Proyectos de Transporte”,  Mascott Pérez destacó que el nuevo aeropuerto trabajará al 100 por ciento con energía limpia; será un proyecto sustentable, uno de los más grandes del mundo y se buscará obtener la certificación Leed que muy pocos aeropuertos en el mundo tienen.

“Esta certificación Leed es la máxima certificación que un aeropuerto puede tener en materia de sustentabilidad, y estamos seguros que la vamos a obtener”, destacó la funcionaria.

En cuanto al relanzamiento de trenes de pasajeros, dijo que el Tren México-Toluca será el primero de alta velocidad en América y en Latinoamérica. Una vez en operación, añadió, transportará a 230 mil pasajeros diarios, en un recorrido de 39 minutos a una velocidad promedio de 90 kilómetros, y tendrá puntos en que la velocidad va llegar a 160 kilómetros por hora.

Por su sistema de frenado con regeneración, va permitir que anualmente se evite la emisión de 27 mil 800 toneladas de dióxido de carbono, aseguró.

El Tren Ligero de Guadalajara, por su parte, duplicará la red de transporte masivo de la zona metropolitana de esa ciudad.

Al igual que la línea 3 del Tren Ligero de Guadalajara, la Línea 3 del Metro de Monterrey, y el Tren Interurbano México-Toluca, son proyectos de transporte masivo que están ubicados en zonas donde se genera el 40 por ciento del Producto Interno Bruto y reside la tercera parte de la población del territorio nacional; de ahí su gran trascendencia.

Finalmente, la funcionaria  advirtió en su exposición que “las fuerzas que impulsan el transporte son irreversibles, estamos creciendo; como irreversible también es la exigencia de la sociedad para que la necesidad de llevar personas y mercancías sea satisfecha preservando el medio ambiente. Que la búsqueda del desarrollo económico no comprometa el futuro”.