Por: Redacción/

Con el objetivo de que médicos veterinarios y productores suministren adecuadamente insumos y medicamentos a animales de consumo tanto terrestres como acuáticos, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural fomenta el uso de buenas prácticas en las unidades de producción, con lo cual contribuye a preservar la inocuidad de los alimentos y combatir la resistencia antimicrobiana.

A través del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), la dependencia federal encabeza un grupo de trabajo con instancias del sector Salud para el diseño de estrategias y programas que deriven en acciones de mejora en la producción de alimentos sanos y seguros para los consumidores mexicanos.

Este trabajo interinstitucional proyecta también la actualización de normas oficiales mexicanas que contienen las especificaciones para regular productos químicos, farmacéuticos, biológicos y alimenticios para uso y consumo de animales.

De igual manera, el grupo se propone establecer lineamientos para la clasificación y prescripción de productos farmacéuticos veterinarios para controlarlos y minimizar el riesgo que implica el uso de algunos ingredientes activos.

El Senasica opera campañas informativas dirigidas a los productores para fomentar la certificación en buenas prácticas y disminuir el riesgo de que los productos de origen animal contengan contaminantes físicos, químicos o microbiológicos, y, de esta manera, prevenir enfermedades transmitidas por alimentos (ETA).

El uso indiscriminado de antibióticos y quimioterápicos en animales provoca que las bacterias, hongos, virus y parásitos se vuelvan inmunes a los medicamentos pues desarrollan resistencia antimicrobiana, lo que resulta en la inefectividad de los tratamientos de enfermedades en los propios animales y en humanos.

El Senasica promueve entre los productores la consciencia de que el control y la utilización racional de medicamentos veterinarios y demás insumos agropecuarios son fundamentales para preservar la inocuidad de los alimentos de origen animal.

Cabe destacar que la demanda de productos cárnicos para consumo nacional, el intercambio comercial de ganado, sus productos y subproductos, es cada vez mayor y ha generado incremento en la intensidad de los procesos de producción pecuaria, lo que conlleva a extremar las medidas preventivas en los procesos productivos para disminuir el riesgo de que se presenten problemas sanitarios y de inocuidad.

El buen uso de insumos en la producción pecuaria está normado a nivel mundial por organismos internacionales, de los que México forma parte, como la Comisión del Codex Alimentarius, la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), el Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA) y la Conferencia Internacional para la Armonización de los Requisitos Técnicos para el Registro de Medicamentos Veterinarios (VICH).

El tema es parte importante de los elementos que se evalúan durante las negociaciones entre países y regiones para concretar acuerdos o tratados de comercio de mercancías pecuarias, pues el propósito es proteger la salud de los consumidores.