Por: Redacción

El tema del espionaje a periodistas y defensores de derechos humanos se está quedando “peligrosamente en el olvido”, advirtió la diputada federal del GPPRD, Lluvia Flores Sonduk, al señalar que el Congreso de la Unión no debe permitir que eso suceda.

Dijo que fue bastante penoso que la Procuraduría General de la República (PGR) haya anunciado que el FBI de Estados Unidos apoyaría a la investigación del espionaje, y después la embajada de ese país haya desmentido a la institución de procuración de justicia de México.

La secretaria de la Comisión de Comunicaciones de la Cámara de Diputados dijo que el hecho de que la misma representación estadunidense haya boletinado que no tiene ningún conocimiento que el gobierno mexicano haya hecho tal solicitud al FBI, muestra además una total falta de responsabilidad de las autoridades de nuestro país.

Consideró que “el gobierno federal pretende hacernos creer que quiere investigar a fondo este asunto, pero más bien lo que busca en el fondo es distraernos para dejar pasar el tiempo y que el tema quede en el olvido.

“En última instancia -apuntó la diputada guerrerense-, el gobierno busca que pase el tiempo para acomodar las cosas sobre lo que verdaderamente ocurrió, encontrar chivos expiatorios y limpiar de cualquier responsabilidad a funcionarios de primer nivel que estén involucrados por ordenar el espionaje”.

Flores Sonduk insistió en la obligación que tiene el Congreso de la Unión de ser uno los coadyuvantes en la investigación de lo ocurrido y llamar a los titulares de las dependencias involucradas a que den cuenta de los hechos y que asuman las responsabilidades que les corresponden.

Por otra parte, aseguró que poca atención se ha puesto en la responsabilidad que tienen los mandatarios estatales quienes, consideró, igual que el gobierno federal, están obligados a informar sobre los servicios de espionaje que tienen contratados, con qué empresas, montos y respondan a las acusaciones que los señalan como responsables.

Explicó que si bien se sabe, por reportes periodísticos, de que algunas entidades adquirieron equipos de espionaje, los gobernadores insisten que no cuentan con dichos equipos y que no espían a nadie, situación que es difícil de creer.

Insistió que al parecer hay varios casos como los de Durango y Guerrero, cuyos titulares estatales han afirmado que al llegar al gobierno no se encontraron con equipo alguno a pesar de que, en el caso del segundo, han solicitado recursos para actualizar el software, como lo documentó en días pasados un medio de comunicación.

La legisladora dijo que es claro que el gobierno federal y las entidades federales deben contar con equipos de espionaje, pero debe ser para investigar a grupos de narcotraficantes y al crimen organizado, no para hostigar a los críticos y opositores al gobierno en el poder.