Por: Redacción/

El sexenio de Enrique Peña Nieto se caracteriza por la corrupción y la impunidad de gobernadores y ex gobernadores y por ello es urgente un cambio en la conducción del país que frene al sistema priista que es “corrupto y corruptor”, afirmó el Vicepresidente de la Mesa Directiva de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, el diputado federal del PRD, Rafael Hernández Soriano.

Tras la vinculación a proceso por desfalco de 900 millones de pesos, entre otros delitos imputados por la PGR al ex gobernador priista de Quintana Roo, Roberto Borge, el legislador federal indicó que con éste van 13 ex mandatarios estatales que están siendo investigados o señalados por el abuso de poder y haber dañado al erario público. Sin embargo, persiste la impunidad desde las más altas esferas del poder.

“La impunidad se ha vuelto inocultable para el gobierno federal. Espero que la impunidad no siga siendo la constante del sexenio de Peña Nieto”, dijo y agregó que es necesario que “haya sentencias, no sólo el inicio de carpetas de investigación”.

El legislador sostuvo que “tal parece que el presidente Peña cubre, cual si fuera capo de una banda de delincuentes, a estos gobernadores y no avanzan en la definición o conclusión de sentencias por daños al erario”.

Sostuvo que “el sistema priista es corrupto y corruptor, y cuando las bandas tienen un interés ilícito se protegen entre ellas; hay un pacto de impunidad en el presidencialismo priista”.

En su opinión, Borge es un botón de muestra pero hay muchos más ejemplos de corrupción: Javier Duarte (Veracruz), César Duarte (Chihuahua), Tomás Yarrington y Eugenio Hernández Flores (Tamaulipas), Andrés Granier (Tabasco) y Jesús Reyna (Michoacán).

“Nos podemos ir así hasta llegar a los 13 gobernadores: lo que hay es una pandilla de ex gobernadores que han sido protegidos durante el ejercicio por el sistema autoritario del PRI”.

Sostuvo que “andan tras los gobernadores que dejaron que se despacharan con la cuchara grande, que beneficiaron al PRI en sus campañas, pero que perdieron las elecciones”.

Hernández Soriano indicó que el freno del nombramiento del nuevo titular de la PGR es una señal del gobierno de Peña Nieto de no querer avanzar en el combate a la corrupción, ya que se mantienen con un encargado de despacho, por lo que no se puede esperar una auténtica persecución del delito aunque se inicien procesos en contra de ex mandatarios.

“Es preocupante que no tengamos procurador: tenemos un encargado de despacho. Eso es obstrucción de la justicia. El presidente Peña tiene que hacer una propuesta de procurador, pero como no quieren a alguien que vaya a fondo, por eso no actúan”, añadió.

El Vicepresidente de la Mesa Directiva de la Comisión Permanente afirmó que las leyes que se han aprobado en la 63 Legislatura son de primer nivel del Sistema Nacional Anticorrupción. “Son de avanzada. El problema no es normativo; es de impunidad”.

La consecuencia de una sentencia es el pago de un daño y eso tiene que darse quitándoles las propiedades, saber dónde está lo robado y que reciban la sentencia que sus faltas ameritan, manifestó el legislador del PRD.