Por: Redacción

Un grupo de estudiantes de las carreras de ingeniería en automatización e ingeniería civil de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) obtienen energías renovables a través de la combinación de suelos.

El proyecto consiste en analizar el voltaje que pueden generar ciertos tipos de tierras, luego de mezclarse con agua y metales, como el aluminio y el cobre, explicó el estudiante Alejandro Francisco Assad Merlo.

“El proceso básico es que se colocan dos cubetas de 19 litros, una con tierra negra y otra con arena en las que se colocaron cinco tubos de cobre que actúan como elemento negativo, y cinco de aluminio, como positivo”, detalló el joven.

“Mientras que los suelos con el agua actúan como electrolito, lo que permite el intercambio electrónico entre los dos primeros elementos y con esto se genera un voltaje”, agregó.

En una entrevista con la Agencia Informativa del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), Assad Merlo destacó el uso de la arcilla para este tipo de modelos experimentales, pues contiene un alto contenido de materiales biológicos y minerales que permiten generar más voltaje.

Durante la investigación, los estudiantes descubrieron que entre más básica sea la tierra provoca mayor voltaje, además hallaron que los suelos arenosos mostraron diferencias de potencial, las cuales iban desde 0.5 hasta 0.8 voltios.

“Pero el suelo arcilloso, por la mayor cantidad de componentes biológicos que tiene, si se le adiciona algo de cal ofrece diferencias de potencial de entre 1.2 a 1.3 voltios, lo que se acerca a los valores de una pila AA convencional”, resaltó el estudiante.

Por su parte, el asesor del proyecto, Gonzalo Macías Bobadilla, afirmó que este tipo de estudios son la punta de lanza para desarrollar nuevas líneas de investigación en cuanto al almacenaje de este tipo de energía.

“Ya se están realizando estudios para establecer redes de baterías de tierra que pudieran instalarse en jardines o caminos de luz a través de focos led”, apuntó.

“Los retos están en trabajar en nuevas tecnologías aplicadas respecto al diseño de baterías, cables y electrodos que puedan soportar la condiciones de humedad de los suelos donde son instaladas”, abundó.

Aunque en México se desconoce la creación de energía producida por los suelos, refirió el asesor, en otros países existen estudios donde proyectan cultivo de ciertas plantas para volver más alcalino el suelo, a fin de que pueda tener mayor conducción de energía.

“Resulta importante que en México también enfoquemos el trabajo de investigación en energía producida por los suelos, así como ya se trabaja en la energía solar o eólica”, sostuvo.