Por: José Manuel Mota Fernández/

Bélgica se convirtió en el segundo equipo en avanzar a las semifinales de la competencia, luego de derrotar 2-1 a su similar de Brasil con el autogol de Fernandinho y el tanto de Kevin De Bruyne en el segundo tiempo, además de la gran actuación de Thibaut Courtois.

Brasil, como la última esperanza del continente americano, llegó al segundo partido de los cuartos de final en contra de Bélgica, el eterno caballo negro que no se guardó absolutamente nada en el partido y que, gracias a su poderío ofensivo, le eliminó a la llamada ‘Canarinha’.

Los primeros minutos, como en casi todos los partidos de esta Copa del Mundo, fueron cerrados, disputados en el centro del terreno de juego y con ligeros latigazos que incomodaban las defensas en ambas partes, sin embargo, los intentos no lograron progresar hasta que se hizo presente el error.

Fue en el minuto 13, luego de un cobro desde la esquina de Kevin De Bruyne que Fernandinho, en un intento por despejar la bola, falló en el contacto y con el hombro mandó el esférico al fondo de su portería ante la tardía reacción de Alisson Becker que no pudo sacar la bola.

Más adelante, el mismo De Bruyne, hizo alarde de su técnica individual y su buen momento futbolístico para ampliar aún más la ventaja en el partido. El casaca siete de los ‘Diablos’ tomó el balón desde el costado derecho y mandó un tiro cruzado para vencer, una vez más, la meta sudamericana.

El complemento comenzó diferente, con un equipo brasileño volcado al frente y con mucha más idea por parte del ‘Scratch Du Oro’, sin embargo, todas sus aproximaciones, incluyendo un posible penal que no se señaló, fueron llegadas vanas que terminaron, principalmente, con movimientos de puerta.

Cuando todo parecía perdido, con Bélgica encerrado atrás en busca de un contragolpe, Renato Augusto le dio vida al pentacampeón. De nueva cuenta, un servicio al área se convirtió en la herramienta necesaria para hacer daño y con la testa redujo la ventaja a 15 minutos del final.

Luego de esto, los dirigidos por Tite se fueron con todo en contra de la portería defendida por Thibaut Courtois. Primero fue Fernandinho con un tiro de media vuelta que se fue por encima y luego Coutinho con un zapatazo de media distancia que no encontró dirección de gol y así, se terminaron las esperanzas de los brasileños.

En el tiempo de compensación, Courtois reafirmó el dominio de Bélgica. Neymar, que intentó echarse el equipo al hombro, sacó un zapatazo desde las afueras del área, buscando el ángulo superior izquierdo de la meta enemiga, pero la mano salvadora del portero del Chelsea evitó el empate.

Con este resultado, Bélgica se medirá a Francia en las semifinales de la competencia.