Por: Redacción/

En sus diferentes novelas, la escritora británica Jane Austen (1775-1817) mostró su capacidad de observación respecto a la vida social y personal de la gente de finales del siglo XVIII e inicios del XIX, comentó Lucía Melgar, profesora de literatura y género, al participar en el ciclo Cine y literatura: Jane Austen.

En la cuarta sesión del ciclo organizado por la Cineteca Nacional y la Coordinación Nacional de Literatura del INBA, la doctora en literatura hispanoamericana, fue la encargada de comentar el filme Northanger Abbey (La abadía de Northanger, 2007) del director Jon Jones, basado en la novela homónima de Austen, escrita en 1798 y publicada de manera póstuma en 1818.

Northanger Abbey presenta como protagonista a Catherine Morland, hija de un clérigo rural, quien es invitada por los señores Allen a pasar el verano a Bath. Allí conoce a Henry, hijo del General Tilney. Ambos se enamoran e inician un romance que se ve interrumpido por una serie de circunstancias que los alejan.

Este telefilm presenta diferencias en los personajes y diálogos con respecto a la novela, pero logra acerca al espectador a la obra literaria de Jane Austen, indicó Lucía Melgar posterior a la proyección, realizada en la sala 4 de la Cineteca Nacional.

Melgar estableció que Jane Austen mostró en sus novelas una visión crítica y lúdica respecto a las condiciones de las mujeres de su época, creando heroínas inteligentes con sentido del humor, un poco ingenuas pero de buen corazón, cualidades suficientes para que encontraran la felicidad.

“Austen le da a la heroína de su primera novela un final feliz, no exagerado. Las mujeres que aparecen no son pasivas, ni víctimas ni tontas y las que resultan interesadas reciben un castigo, aunque sea transitorio”.

Añadió que la escritora nacida en Steventon, Reino Unido, hace también una crítica a los excesos de la feminidad de la época, así como un análisis de la forma de hablar de la gente, retratando de cierta manera su personalidad y carácter.

“Northanger Abbey resulta interesante. La película mantiene algunos elementos importantes de la novela y hace uso de efectos visuales para mostrar la imaginación de la protagonista”, apuntó la ex colaboradora del Programa Universitario de Estudios de Género (PUEG) de la UNAM.

Destacó que la escritora británica hizo en este texto una interesante alusión a las novelas góticas, refiriéndose por ejemplo al libro Los misterios de Udolfo de Ann Radcliffe, el cual es leído por la protagonista Catherine Morland fomentando su imaginación.

“En las novelas góticas aparecen castillos con fantasmas y vampiros, escenas que no se podían contar de manera realista sino a través de posesiones, en un mundo mágico y ambiguo entre la realidad y la ficción.

“Lo que hace la película es mostrar lo que sueña Catherine relacionado a lo que lee, en cómo la novela de Radcliffe influye en esos deseos o sueños. De cierta manera se plantea que una mala lectura de la novela gótica lleva a una imaginación desbocada, y por otro lado se dice que las mejores lecturas son las novelas porque hablan de la complejidad de la naturaleza humana”.

Lucía Melgar indicó que tanto en el texto como en la película se muestra a Catherine como una chica ingenua que tiene que aprender a leer la vida. “Ella no se vuelve súbitamente madura, madura en el proceso de saber leer entre líneas como son las otras personas”, apuntó.

En la charla, a la investigadora independiente se le cuestionó sobre si en esta novela Jane Austen planteó un ideal, a lo que respondió que tal vez hay una autobiografía en sentido indirecto.

“Me pregunté si ella se refería a su propio descubrimiento de la literatura. Síhay una reflexión respecto a la literatura de ficción y presenta un ideal de hombre: el que respeta la inteligencia de la mujer”.

El ciclo Cine y literatura en torno a Jane Austen, continuará el 13 de noviembre con la proyección de Orgullo y prejuicio (Joe Wright, 2005) con los comentarios de Fernanda Melchor. Cerrará con Mansfield Park (Patricia Rozema, 1999) el 27 de noviembre de 2017 con la participación de Alejandro Higashi.

La entrada a estas actividades es libre. Se debe solicitar cortesía en la taquilla 5 de la Cineteca Nacional, ubicada en la Avenida México-Coyoacán, No. 389, Col. Xoco.