Por: Oswaldo Rojas

*“Decidí explorar una parte de mi vida, la búsqueda de mi padre biológico”

*Se estrena en enero de 2016 con dos funciones en el Teatro Intimo, en Hermosillo, Sonora

La actriz Aura Arroyo Mascareño apoyada en el Programa de Estímulo a la Creación y el Desarrollo Artístico (PECDA), encontró en el género conocido como biodrama el lugar para realizar su obra sobre la búsqueda de la paternidad “Entre la honestidad y el olvido”.

La puesta en escena se da en colaboración con el la Secretaría de Cultura del Gobierno Federal, a través de la Dirección General de Vinculación Cultural y el gobierno del estado de Sonora.

El comunicado de prensa difundido por la Secretaría de cultura explica que el biodrama es una combinación entre el género dramático y la biografía. Recreando la tensión entre la ficción y la realidad, lo público y lo privada.

Arroyo Mascareño explicó a la secretaría que se trata de una búsqueda de la paternidad, para la cual retomó la obra “El Padre”, de August Strindber.

“Decidí explorar una parte de mi vida, la búsqueda de mi padre biológico. Me interesó averiguar qué pasó con la figura paterna que estaba ausente, qué me identifica y cómo me defino a partir de esta ausencia. Es una cuestión de identidad y sobre los beneficios o vacíos y dolores que trae esta ausencia” dijó la actriz.

Tras el proceso de adaptación del lenguaje y la utilización de los recursos multimedia “Entre la honestidad y el olvido”, se estrena en enero de 2016 con dos funciones en el Teatro Intimo, en Hermosillo, Sonora.

Sobre el título de la obra Mascareño explica que se trata de conciliar la falta de un padre y la forma en que esta define la personalidad.

“A veces intentamos ocultarlo, pero sí está pasando. Al mismo tiempo que identifico eso, pienso en la interpretación. Debo ser honesta con lo que pasa, con lo que siento, con la somatización de las emociones y estados de ánimo, los pensamientos tienen que ser verdaderos”, comenta en el comunicado.

Aura Arroyo Mascareño, egresada de la carrera de actuación de la Universidad de Sonora, dijó a la secretaría que en su profesión puede resistirse a la realidad que no la satisface.