Por: Montserrat Sánchez Maldonado
En 1947 el pintor mexicano Diego Rivera, fue invitado por el arquitecto Carlos Obregón Santacilia, para ejecutar un nuevo mural en el Hotel del Prado, situado en la avenida Juárez, muy cerca de la Alameda Central.
El mural, bautizado como Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central, fue concebido bajo la técnica fresco, la cual consiste en pintar sobre una capa de estuco húmeda con pigmentos minerales diluidos en agua. Al secar la cal, con el cambio químico, se aglutinan los pigmentos y se fijan los colores volviéndose insolubles al agua.
En la obra, la cual pesa 35 toneladas y mide 15 metros de ancho, quedaron el registro de personajes, instantes de la historia nacional, así como momentos personales del autor.
Frida Kahlo, Rosa Rolando de Covarrubias, Ruth y Guadalupe Rivera Marín y dos autorretratos de cuando Diego Rivera era niño, son algunas de las figuras que representan la vida personal del pintor en la obra.
Mientras que en el aspecto social, el pintor y miembro alguna vez del Partido Comunista Mexicano (PCM), reflejó temas relacionados con la política, la exclusión social, la religión, la historia e inclusive la moral.
En la descripción del personaje llamado Raterillo, ubicado del lado derecho de la pintura, se puede leer que es un hombre que sueña con el alimento que podrá comprar con el producto de su hurto a un hombre de clase alta.
Asimismo, se puede observar que a casi siete décadas, sigue vigente la representación de un trabajador informal, pero a éste no le es suficiente lo que gana ni para la adquisición de calzado propio.
Pero cómo ignorar al gendarme, el cual realiza su labor de cuidar que la gente decente, pueda transitar sin tener que mezclarse con los del pueblo, mientras que miembros de la clase alta observan la escena la cual, mediante sus sonrisas, parece que están disfrutando.
Por otra parte, en la obra se encuentran personajes como Ricardo Flores Magón, Franciso I. Madero, Ignacio Ramírez, la Emperatriz Carlota y su esposo Maximiliano de Habsburgo, el General Mariano Rodríguez, José Martí, José Guadalupe Posada, Joaquín de la Cantolla y Rico, Nicolás Zúñiga y Miranda, Juan Sánchez Azcona y José Vasconcelos.
El cuadro fue desplazado de su ubicación original en el restaurante Versailles del Hotel Del Prado a raíz del temblor de 1985 y su actual ubicación en el Museo Mural Diego Rivera que se encuentra en Balderas y Colón s/n, Centro Histórico, Delegación Cuauhtémoc, México, D.F, con un horario de martes a domingo de 10:00 a 18:00 horas.
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