Por: Patricia Ramírez

Por motivo del terremoto acontecido el pasado 7 de septiembre que afectó principalmente a la región del Istmo de Tehuantepec, la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) implementó medidas para supervisar el respeto a los derechos humanos de la ciudadanía afectada por parte de las autoridades responsables.

Durante los recorridos de apoyo realizados por la DDHPO, los damnificados de Juchitán, Oaxaca, manifestaron quejas contra agentes de la policía municipal por agresiones físicas y malos tratos, al igual que delitos como robo a viviendas afectadas y extorsión.

Ante esta situación, la Defensoría considera que los elementos de la policía atentan contra los derechos humanos, la legalidad y la seguridad jurídica, así que deben sujetarse a normas y principios para asegurar a la población que el Estado cuidará de su persona.

Asimismo, acusó de incapacidad a la policía municipal para brindar apoyo y seguridad a los ciudadanos, por lo que recomendó a Alejandro Murat Hinojosa, gobernador del estado de Oaxaca, solicitar la colaboración del Ejército Mexicano para esta labor.

De igual manera, lo consideró una violación al artículo 21 constitucional, el cual establece el derechos a la seguridad ciudadana, y debe efectuarse con profesionalismo, legalidad, eficiencia y respeto a los derechos humano.