Por: Risso Alberto

Cuando Bon Scott vociferaba Lock up your daughter, lock up your wife, lock up your back door, and run for your life en el debut norteamericano de AC/DC, High Voltage (1976), no solo amenazaba a las buenas conciencias, sino que también celebraba su inalienable derecho a ser rudo y grosero.

AC/DC mostró lo divertido que es no tener ‘sentido musical’ y que tan liberador podria sonar el serlo. Estos delincuentes australianos tocaron su enrojecido blues rock, con el veneno propio del punk y la altanería propia de un verdadero rockero. La primera parte de la serie de re-ediciones del catalogo de AC/DC captura a la banda en su momento mas políticamente incorrecto.

Ambos álbums, High Voltage y Dirty Deeds Done Dirt Cheap fueron los discos que funcionaron como carta de presentacion ante las audiencias estadounidenses, quienes se encontraban ansiosos de un rock visceral y natural. Ademas de encontrar en si mismos sus fuerzas y virtudes. Las guitarras de los hermanos Angus y Malcom Young se gruñen una a otra. Phil Rudd provee una base rítmica solida y solvente a pesar de que destrozará su bateria en el intento. Mientras, Scott no solo vocifera, sino que ladra con su peculiar, aguardientosa y ñera voz. ¿Los motivos de la banda? Simplemente divertirse y tocar lo que les apasiona, como en la rola Ride On, donde Scott considera las consecuencias de ser un stalker nocturno.

Dirty Deeds Done Dirt Cheap, canción que da titulo al larga duración, abre con el ya clásico riff provisto por los hermanos Young, siguiendo con el gruñido de Scott que dice que el hará los trabajos sucios que tu no puedes hacer como terminar con una chica que te engañó o de como desparecer a alguien con zapatos de cemento.

Las rolas contienen temáticas sexuales casi explicitas como en Big Balls o Squaler que ademas, contienen el estilo que la banda había estado desarrollando Adelaide, su ciudad natal. Un estilo que jamas dejarian , un estilo que hasta nuestros dias aun sigue sonando tan visceral como cuando salio a la venta T.N.T.

Al paso de los años el álbum- cuya portada fue diseñada por el despacho gráfico Hipgnosis, encabezado por Storm Thorgerson–  se encontró en un proceso de revalorización, ya que en su época, fue duramente criticado por los diversos medios musicales como Rolling Stone, Melody Maker y New Musical Express. Su sucesor, Let There Be Rock, representaría un autentico documento de como el rock debería de sonar a finales de los 70’s, sin adornos, duro y a la cabeza. Tras Let There Be Rock, llegó Powerage con una fuerza que sus predecesores no capturaron en su momento, rolas como Rock And Roll Damnation, What´s Next To The Moon, pero sobre todo Riff Raff, con su vertiginoso ritmo que no daba descanso, una de sus mejores rolas.

Highway To Hell de 1979 fue, para la banda, su ingreso a las grandes ligas del rock, su llave para poder acceder a las arenas, donde solo los mas grandes grupos podían darse el lujo de tocar ahí, donde bandas del calibre de Led Zeppelin o Pink Floyd residían.   Tan solo un año después la tragedia toco a la puerta de la banda, Bon Scott se había ahogado con su propio vomito, ¿Que hizo la banda? Editar Back In Black junto al productor Robert John ‘Mutt’ Lange y a su nuevo vocalista Brian Johnson. Sortearon a la muerte, regresaron mas vivos que nunca y lo demás es historia.