Por: Araceli Isidro

“Este día es importante porque entregamos a los presidentes municipales de  Cuautlancingo, Chichiquila, Huejotzingo, Nealtican y San Pedro Cholula los Atlas de Riesgos, y a los ediles de Chignahuapan, Ajalpan y Acajete les entregamos sus Planes de Ordenamiento Territorial, que son instrumentos base de conocimientos del territorio y de los peligros que pueden afectar a su población” , dijo el subsecretario de Ordenamiento Territorial de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU), Enrique González Tiburcio.

En el evento al que González Tiburcio asistió en representación de la titular de la SEDATU, Rosario Robles, se entregaron cinco  Atlas de Riesgo y tres Planes de Ordenamiento Territorial a municipios del estado de Puebla que pudieran resultar afectados por los fenómenos naturales.

El funcionario y Lastiri Quirós, subsecretario de Desarrollo Urbano y vivienda, firmaron un convenio de colaboración con el rector de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), José Alfonso Esparza Ortiz, para profesionalizar a funcionarios en temas de registros y catastros.

“Este trabajo está vinculado a la Guía de Resiliencia Urbana, la cual está contemplada en la Ley General de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano y que está direccionada sobre todo a prevenir riesgos provocados por fenómenos naturales, y por ende a proteger a la población de los municipios que pudieran resultar afectados por estos”, afirmó González.

El subsecretario de Ordenamiento Territorial   “la coordinación entre los tres niveles de gobierno para concretar acciones de prevención que tienen como objetivo salvaguardar la integridad de los poblanos, así como ordenar el territorio a fin de tener un mejor desarrollo”.

A la entrega de Atlas asistió el titular de la Secretaría Técnica del Consejo Nacional de Protección Civil, Luis Felipe Puente Espinosa, que destacó la importancia de “redoblar esfuerzos para supervisar todas las zonas de laderas para evitar contingencias mayores, porque debemos entender el lugar donde vivimos para mitigar los efectos de los fenómenos naturales”.