Por: Rafael García 

En 2011, se comenzó a trabajar en el primer avión cien por ciento mexicano. En 2013, se logró el primer prototipo, Pegasus PE-210-A, y hace unos días, en el marco de la Feria Aeroespacial México (FAMEX), 2017, celebrada en la base aérea de Santa Lucía, se presentó el segundo trabajo de los jóvenes oaxaqueños, Pegasus P4000T.

En la FAMEX 2017, la Fuerza Aérea Mexicana (FAM), perteneciente a la Secretaría de Defensa Nacional (SEDENA), y la empresa aeronáutica espacial Oaxaca Aerospace, firmaron un acuerdo en que la FAM los asesorará para patentar el Pegasus, y además, se pactaron una serie de mantenimientos periódicos al avión mexicano.

El documento fue firmado por Carlos Antonio Ramírez Munguía, comandante desde 2013 de la Fuerza Aérea Mexicana, así como por Raúl Fernández, Director Ejecutivo de Oaxaca Aerospace. Jesús Rodríguez, Secretario de Desarrollo Social de Oaxaca, dijo que con este proyecto, Oaxaca debe ser vista como una entidad emergente tecnología.

El Pegasus Pe-210A, que fue mostrado al público por primera vez en la FAMEX 2015, es un aeronave de entrenamiento que posee un ala Canard; dicha característica permite tener estabilidad en niveles bajos. Esta aeronave comenzó a probarse en pista desde 2013, que cuenta con 180 horas vuelo gracias  a un programa de ensayos que desarrolló el Instituto Politécnico Nacional (IPN).

El último prototipo, Pegasus P400T, es una versión completamente mejorada en la que trabajaron 30 ingenieros oaxaqueños, que sustituyeron esta vez el motor de pistón por una turbohélice, que junto con la aerodinámica mejorada, permite que el avión recorra los 550 kilómetros por hora.

Se pretende que el Pegasus comience a tocar el cielo a finales de este mismo año.