Por: Redacción/

Con el cortometraje Un abrazo de tres minutos (A 3 minute hug), con el que Everardo González logra convertir tres minutos en treinta, con todos los espectadores sumamente conmovidos, es que la plataforma digital Netflix, incursiona en la producción de documental mexicano.
Durante su presentación en una función especial dentro del Festival Internacional de Cine de Los Cabos, la productora Daniela Alatorre, confesó que la incursión de Netflix en la producción de documental, “se debe al interés de la plataforma por llevar contenidos al público estadounidense a través de la visión de un director mexicano; con contenidos de temas delicados entre la relación de México y los Estados Unidos”.

No hay tema más latente entre ambas naciones que el tema migratorio, es por eso que Netflix apostó por Everardo González (La libertad del diablo, 2018), para la realización de su primer documental original, el cual hace un retrato sumamente nostálgico sobre el reencuentro de cientos de familias que fueron separadas por la deportación.

Cuando Everardo González se enteró que el evento #HugsNotWalls se llevaría a cabo a principios de 2018, y que permitiría que familias se pudieran reunir luego de ser víctimas de la deportación y algunas después de 10 años de no sentirse, solamente tenía dos semanas para conseguir los recursos y Netflix no dudó en participar.

“Fue un trabajo con mucha libertad, tenía miedo tratándose de un monstruo corporativo con el que nunca había trabajo, sin embargo logramos llegar a buen puerto. Estoy muy satisfecho con el resultado”, confesó el cineasta durante la charla que mantuvo con el público al final de la proyección.

En cuanto a temas de producción, González externó que su mayor preocupación fue que el evento se cancelara, ya que era algo muy probable, “la reunión no duro más de tres horas y media, las posibilidades de que algo saliera mal eran gigantescas, lo único que pudimos hacer es prevenirnos, llevamos cuatro equipos de producción completos para la realización del documental, no había margen de error”.

Ante un evento único en cuanto a la situación migratoria entre México y Estados Unidos, el documental se limita a mostrar emociones desde el inicio, hasta el final, “no se puede decir mucho en tres minutos, las familias solo se abrazan y lloran, fue la realidad la que nos dijo que más que hablar, debíamos mostrar”.

Y aunque Un abrazo de tres minutos, sin duda es sobre emociones y empatía, los realizadores también querían expresar una posición política a través de él, “es bueno mirar los problemas de migración entre México y Estados Unidos, a través de las miradas y abrazos de estas personas, nos da una postura ante esta situación y este evento, que aunque pudiera parecer cruel, es la única manera que las familias tienen para poder tocarse, tal vez por última ocasión”, concluyó Everardo.

A 3 minute hug se proyectará a principios del 2019 en la plataforma digital Netflix.