La COP28 culminó con dos acuerdos históricos, el primero al inicio de dicha conferencia, en el cual se adoptaron las reglas de funcionamiento del fondo para pérdidas y daños que fue acordado durante la COP27 el año pasado; asimismo, durante el desarrollo de la Conferencia varios países como Alemania, Estados Unidos, Japón, Reino Unido, la Unión Europea y el anfitrión Emiratos Árabes Unidos anunciaron sus aportaciones para dicho Fondo.

El segundo gran resultado fue el primer balance global sobre la implementación del Acuerdo de París, en donde el texto reconoce los avances y desafíos que los países deberán afrontar en cuestiones de mitigación, adaptación, financiamiento, transferencia de tecnología, construcción de capacidades, y pérdidas y daños; además, se hace un llamado a la urgencia de reforzar la acción climática considerando con preocupación los recientes hallazgos relativos al incremento de la temperatura a nivel global por parte del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés).

Dadas las características de México y su alta vulnerabilidad a los efectos adversos del cambio climático, uno de los temas principales de la delegación mexicana fue el marco para el objetivo global de adaptación, cuyo propósito será mejorar la acción y el apoyo a la adaptación, reducir la vulnerabilidad y mejorar la capacidad de resiliencia, con miras a lograr el bienestar colectivo de todas las personas, la protección de los medios de subsistencia y las economías, y la preservación y regeneración de la naturaleza para las generaciones presentes y futuras.

También, durante esta cita multilateral se acordó el primer programa de trabajo para la transición justa, donde México enfatizó la importancia de impulsar la creación de trabajo decente y empleos de calidad, que incluyan protección social y el reconocimiento de los derechos de las personas trabajadoras.

La participación de México se enfocó en impulsar una acción climática basada en la justicia social, el respeto a los derechos humanos y la equidad de género, reconociendo la información que la ciencia está brindando a la comunidad internacional. Además, fue reconocida por los representantes juveniles, quienes gracias al programa “Operación COP, juventudes embajadoras por el clima” participaron destacadamente en las negociaciones multilaterales.

En su intervención, el subsecretario para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Joel Hernández García, remarcó la importancia del multilateralismo para encontrar soluciones para construir un planeta más sostenible y resiliente, resaltando que esto sólo se logrará mediante una transición justa que incluya un enfoque de derechos humanos, género, interseccionalidad e interculturalidad.

En paralelo, el presidente del Consejo para el Desarrollo Sostenible (Codeso) del Gobierno del Estado de Sonora, Francisco Acuña Méndez, presentó los avances del Plan Sonora de Energía Sostenible basado en tres pilares: la generación de energías limpias de manera masiva y a gran escala; el desarrollo de infraestructura estratégica para la industria verde, el valor agregado a todos los minerales estratégicos vinculados a la electromovilidad y semiconductores, y la formación de talento humano.

Por otra parte, México se unió a varias declaratorias para disminuir los impactos adversos de la actividad humana sobre el medioambiente, entre las que destacan la Declaración Ministerial sobre Acción Climática y Salud; la iniciativa sobre Sistemas Alimentarios Resilientes, Agricultura Sustentable y Cambio Climático; las declaraciones sobre transición justa y acción climática con perspectiva de género, y la de Océanos y Acción Climática-Panel de Alto Nivel para una Economía Oceánica Sostenible, así como el Proyecto de Declaración Conjunta de los Estados y organizaciones internacionales que apoyan la iniciativa internacional francesa de lucha contra el sargazo.

De igual manera, México se unió al Compromiso Mundial sobre energías renovables y eficiencia energética, que busca triplicar la capacidad de generación de energía renovable a nivel global, hasta al menos 11,000 GW de aquí a 2030, teniendo en cuenta las diferentes circunstancias nacionales y los diferentes puntos de partida, así como duplicar colectivamente la tasa media anual mundial de mejoras de eficiencia energética, pasando de alrededor del 2% a más del 4% anual hasta 2030.

La vigesimonovena Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP29) tendrá lugar en Bakú, Azerbaiyán, en 2024, donde continuarán los trabajos de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático para definir la nueva meta global de financiamiento.