Por: Oscar Nogueda/

La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) emitió una recomendación al Presidente del Consejo Municipal de Mixtla de Altamirano, Veracruz, Crispín Hernández Sánchez, ante la negación de la recomendación de la Comisión de Derechos Humanos estatal, por el despojo y daños a la propiedad de una persona mayor indígena.

El agraviado fue un hombre indígena náhuatl de 83 años de edad que señaló que personal del Comité de obras, un ingeniero de Obras Públicas y un asistente del programas de PROSPERA argumentaron que, por órdenes del Presidente municipal, utilizaron una retroexcavadora causando daños a su terreno y la perdida de plantíos de café, zapote negro, plátano, tepejilote y la destrucción de árboles de cedro, xochicolhuit, jonote y coyoliyo.

Por tal motivo, la Comisión estatal emitió la recomendación 54/2017, sin embargo, el ayuntamiento se negó a cumplirla. La Presidencia municipal indicó que no podía dale cumplimiento a la recomendación porque los hechos no eran propios de sus administración, los servidores públicos de los que se quejaron ya no trabajan en el municipio y que no podía darle cumplimiento a dicha recomendación local por estar en proceso de impugnación ante la Comisión Nacional.

Aunado a ello, no existía un peritaje para cuantificar la reparación del daño y que había una carpeta de investigación en la Fiscalía estatal que no se había determinado. A pesar de ello, la CNDH confirmó la recomendación estatal y consideró que las conductas atribuidas a las autoridades municipales evidencian responsabilidades en sus funciones.

Por ello, la Comisión Nacional recomendó al Presidente municipal de Mixtla de Altamirano repara el daño, brindar atención médica y asesoría legal al agraviado. Igualmente, lo exhortó a colaborar con el organismo autónomo en la denuncia y queja administrativa ante las instancias correspondientes.

Por último, recomendó a las autoridades del municipio auxiliar en los trabajos de cuneteo, reforestación, nivelación del terreno afectado y todas las medidas necesarias que requiera, con el fin de que la tierra tenga capacidad para la siembra.