Por: Redacción/

Aunque el camino para llegar a Tokio 2020 luce muy complicado para la selección mexicana de rugby 7, pues más de una decena de países luchan por los dos boletos para el repechaje olímpico, Michelle Farah, capitana del combinado tricolor, aseguró que su meta es disputar unos Juegos Olímpicos.

“Mi objetivo definitivamente son unos Juegos Olímpicos, es el sueño máximo de un deportista. Hace dos años tuve la posibilidad de ir a un Mundial, pero unos Juegos Olímpicos para mí, en este momento, sí es mi sueño. Nadie dedicaría tanto tiempo y esfuerzo sino creyera que algún día vamos a llegar, siempre hay que tener los pies bien puestos en la tierra y saber dónde estamos, a dónde queremos llegar y qué es lo que se necesita, eso siempre será la meta y vamos a hacer todo lo que está en nuestras manos para lograrlo, siempre es un orgullo representar a México.

“Siempre hay una oportunidad de clasificar, quedan dos boletos para el repechaje olímpico, no puedo decir que es fácil porque solo son dos y no sé si somos 12 o 16 países peleando por ellos, va a estar muy peleado. Hay muchos equipos y todos tenemos los mismos deseos, es hacer lo mejor que se pueda, mis expectativas son siempre estar mejor que la concentración y el torneo anterior y el rugby, al ser un deporte de equipo, es muy importante también estar bien en conjunto, ahorita que son tiempos de quedarte en casa, es un poco complicado, pero hay que confiar, echarle todas las ganas y hacer, en nuestras posibilidades, lo mejor posible”, comentó.

Hace cuatro años, al rugby mexicano se le escapó la oportunidad de asistir a Río 2016; no obstante, Michelle, de 30 años, mantiene el objetivo pese a las complicaciones que devinieron del Covid-19, como la cancelación de competencias como parte del proceso clasificatorio, por lo que la capitana está ansiosa y emocionada por volver a las canchas oficialmente, aunque desconoce cuándo sucederá.

“En cuanto a nuestra preparación habíamos estado teniendo concentraciones cada mes en la CDMX en el COM y la CONADE, pero ahorita está todo frenado y en marzo tuvimos nuestro último torneo de preparación en Chula Vista, California. Teníamos también un torneo en noviembre y un clasificatorio en la Serie Mundial en marzo pasado en Sudáfrica, pero también se canceló y de alguna manera son torneos de fogueo, que es lo que a México más nos hace falta.

“Estoy súper ansiosa, muy emocionada por regresar. Este tiempo te hace pensar en qué es lo que quieres, si realmente esto es lo que te hace feliz, porque a veces la tristeza es porque extrañas muchas cosas porque sí es tu pasión, pero hay que dar gracias porque en algún momento vamos a regresar aunque no hay fecha, hemos entrenado una o dos veces por semana con nuestro preparador físico por Zoom, pero físicamente todas en un mismo lugar aún no, la verdad es muy difícil hasta que no estemos en semáforo verde y depende de cada estado para volver”, señaló.

Sin embargo, la jugadora, quien inició en esta disciplina a los 21 años, se mantiene activa y aseguró que desde hace dos meses y medio regresó a los entrenamientos en Guadalajara con todas las medidas sanitarias, pues mencionó que mantener la mentalidad positiva es fundamental ya que de ella depende, en gran medida, que los resultados se obtengan.

“Lo más difícil en esta pandemia, como deportista, es que se cancelaran competencias para las que te has preparado desde hace tiempo, sí es difícil, pero también es una oportunidad de mejorar y es como cada quien lo vea, es complicado y triste, pero viéndolo por el otro lado hay más tiempo para mejorar, para llegar más fuerte y todo puede cambiar en un ratito, por eso la mentalidad es súper importante, cuando mentalmente estás bien, fuerte y tienes confianza en tu equipo y en ti, el resultado puede variar muchísimo.

“Con la pausa, hay momentos bastante buenos y hay momentos también bastante difíciles porque la cabeza no deja de dar vueltas y es cuestionarte muchas cosas. Hay veces que sí estoy muy motivada y otras no, pero es estar trabajando todo el tiempo, no rendirse y si un día no me siento bien, no se vale quedarse en esa desmotivación. Los primeros tres meses y medio sí me quede en casa, solo el ejercicio que se podía hacer, y salía a correr, ahora, ya que abrieron, voy a un gimnasio por horarios con las medidas de prevención. Tenemos dos entrenamientos al día en campo, somos cinco personas, pero no importa, porque también es importante, ahí es donde se muestra todo lo demás, pero sí ya hemos podido entrenar estos dos últimos meses más en forma y enfocado en lo nuestro”, detalló.