Por: Marcelo Enrico Moreno de la Rosa 

Sin duda alguna la Lucha Libre Mexicana es uno de los deportes más difíciles de practicar. Está lleno de exigencia física y mental para cualquier persona que decida subirse a un cuadrilátero a jugarse la vida en cada lance y así ganarse la admiración de los espectadores, sean gladiadores rudos o técnicos.

Esta disciplina está regida por la Comisión de Box y Lucha de cada país, pero en todos lados se busca proteger la integridad de los gladiadores.

Detrás del mundo de las llaves y los vuelos asombrosos se encuentran las empresas, que son las encargadas en contratar a los atletas que brindarán el espectáculo (ya sea una o más fechas).

Es importante señalar que las funciones a las que acude un luchador depende del tipo de acuerdo que tenga con cada empresa, ya muchos de los estetas mexicanos viajan a otros países donde les atrae la lucha mexicana, un de ellos, si no es que el principal, es Japón.

En México existen dos mandamás en este ámbito y la más antigua es el Consejo Mundial de Lucha Libre (MCLL), donde aún podemos disfrutar de la lucha clásica al ras de la lona, ya que en ella sus luchadores utilizan más las llaves y contrallaves.

En las filas del CMLL han desfilado íconos del pancracio, como el enmascarado de plata, “El Santo”, quien es una de las grandes leyendas de esta tierra Azteca. El Enmascarado de Plata también fue uno de los grandes actores del cine mexicano con filmes como “El Santo vs las momias de Guanajuato” o “El Santo vs las mujeres vampiro”.

Otro gran representante de la lucha libre mexicana lo fue Blue Demon, ya que no solo fue un gran enmascarado e integrante del bando rudo, sino que compartió pantalla con El Santo.

En 1992 para ser exactos, nació la AAA Worldwide, quien revolucionó la lucha mexicana, ya que creó modalidades que no se habían visto en México.

Entre sus aportaciones está crear ídolos, como superhéroes pero sin capa, mejor dicho, con máscaras, cabelleras largas y mallas, que empezaron a innovar con movimientos espectaculares, sorprendiendo a propios y extraños, y realizando lances acrobáticos o bien confrontando rivales en jaulas, o desarrollando luchas extremas.

Este golpe de frescura hizo que las empresas extranjeras voltearan a México y empezaran a extraer talentos, lo que llevó a gladiadores mexicas a tierras estadounidenses.

La Triple AAA ha logrado diferentes récords y uno de ellos fue llenar uno de los lugares más imponentes de la Ciudad de México, como si tratará del mismísimo “Monstruo de Córdoba” Manuel Rodríguez “Manolete” o “El Faraón de Texcoco” Silverio Pérez, los integrantes de esta empresa “reventaron” hasta el reloj la Monumental Plaza de Toros México, para que los asistentes disfrutaran de una tarde llena luces, piruetas, lances y llaves, lo que generó gritos y asombro en todos los asistentes.

Es importante señalar que el CMLL y la Triple AAA han llegado a conjugar sus talentos y ofrecer espectáculo conjunto, como fue el evento denominado “Padrísimo”, en donde se midieron las grandes estrellas de las dos compañías.

Pero no son las únicas empresas que promueven el pancracio mexicano, existen muchas compañías independientes que dan la oportunidad a luchadores estrella o a gladiadores que van comenzando, y todos, con trayectoria o novatos, tienen el mismo objetivo que los asistentes pasen buenos momentos con este deporte.