Por: César Dorado/

El músico brasileño João Gilberto, quien haya ayudado a consolidar el género Bossa Nova y llevarlo a diversos rincones del mundo gracias a su gran desempeño en la guitarra y voz, murió este sábado a los 88 años de edad, de acuerdo a un anuncio de su hijo João Marcelo en una publicación en redes sociales “Murió mi padre. Su lucha fue noble, él intentó mantener la dignidad incluso con la pérdida de la independencia. Doy las gracias a mi familia (a mi lado de la familia) por estar ahí junto a él”.

Guitarrista talentoso que, durante la década de 1960, junto con Antônio Carlos Jobim, consolidó el género Bossa Nova con un estilo fresco y dulce, se caracterizó por crear armonías que empapaban los sentidos de sonidos tranquilos y voces acarameladas. Tras su gran logro musical, llevó a un plano internacional los sonidos provenientes de tierras cariocas y así, con un éxito rotundo, engendró talentos como el de Veloso, Gilberto Gil y Chico Buarque, quienes inspirados por “Chega de saudade” (1958) continuaron aportando ideas al género.

Siempre apartado de la prense y con un fiel amor a la música, João Gilberto ganó un pleito el pasado mes de marzo por los derechos de autor de sus primeros discos por el que según una juez le debían pagar 40 millones de euros.

Alejado de todos, el cantante siempre mantuvo una actitud aislada los últimos años, en donde también la amargura y su precaria situación financiera llevaron a su hija Bebel Gilberto a mover un proceso para privar a su padre de derechos civiles. Con todo y una actitud melancólica, indudablemente, la huella del guitarrista y cantante siempre estarán impregnadas dentro de la cultura y la música internacional.