Por: Redacciòn/

“Para ser un futuro profesional del cello, un alumno necesita ser guiado y asesorado, además de instruido en el instrumento con diversos complementos como libros, discos, conciertos, exposiciones, viajes, cursos y concursos”, afirmó en entrevista Eduardo Palao, director artístico y cofundador del Festival Internacional de Cello, que se llevará a cabo del 2 al 7 de julio en Puebla.

Eduardo Palao, originario de Zaragoza, España (1973), actualmente profesor titular en el conservatorio profesional “Joaquín Turina”, de Madrid, fue el iniciador junto con el maestro poblano Eduardo Carpinteyro, de este festival, cuya programación se distingue por el refuerzo en el área académica dirigida a los jóvenes estudiantes del cello.

Tras una colaboración en unas clases magistrales, ambos Eduardos decidieron poner en marcha este importante proyecto en torno a su instrumento, con el fin de acercar a los estudiantes y jóvenes profesionales del violonchelo la oportunidad de recibir clases, escuchar y participar en conciertos y conferencias, y ampliar en definitiva sus horizontes con respecto al violonchelo.

En su cuarta edición, el Festival Internacional de Cello tendrá como sede la Facultad de Artes de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) en donde compartirán sus conocimientos y experiencias maestros de la talla de Marcio Carneiro, ganador del Concurso Internacional Tchaikovsky de Moscú y el violonchelista colombiano Santiago Cañón, considerado a sus 23 años como una de las jóvenes promesas de su generación.

Predominarán masterclasses, conciertos, talleres y exposiciones, en las que alrededor de 80 estudiantes y jóvenes cellistas inscritos hasta el momento de todo el país y del extranjero, se reunirán durante una intensa semana de actividad, aprendizaje y arte.

Los interesados podrán inscribirse desde 400 pesos hasta los 3 mil 500 pesos, que incluyen diversos paquetes y descuentos para los interesados.

En este sentido, Palao resaltó que durante estos años se ha procurado mantener precios accesibles con la intención de que el aspecto económico no sea un impedimento para quien tiene talento, voluntad y ganas de aprender.

“Me sorprende ver cuanta gente hay con mucho talento, pero con pocos medios, por lo que pensamos la manera de que sí ‘Mahoma no va a la montaña, la montaña fuera a Mahoma’ y entonces organizar un taller que atrajera a maestros de fuera, gente que no estaría al alcance de estos chicos sino es porque alguien los acerca a ellos, y así fue como empezó todo en 2015”.

Eduardo Palao, quien ha sido invitado a impartir también cursos y masterclasses en diversos cursos y festivales de España como el “Martín Códax” o los “Encuentros de Violonchelo de Mieres”, así como en el extranjero, como el curso de música de Greenwood, en Massachussets, EEUU, visualiza seguir creciendo este festival hasta conseguir crear un fondo de becas permanentes.

Resaltó que en sus objetivos está ayudar a los jóvenes a que vayan a hacer pruebas al extranjero, ayudarles con sus estudios, y dentro de esta ayuda también contemplan crear un fondo permanente de instrumentos que funcione con base en donaciones y así poder prestarlos a aquellos que no cuenten con un buen instrumento.

“La visión del festival está muy clara y creo que el formato que hemos elegido funciona muy bien. Esperamos que esto siga creciendo y que podamos otorgar las becas necesarias. Para ser la cuarta edición, vamos con paso firme y en los resultados lo podemos ver”.

Para mayor información sobre costos e inscripciones se puede consultar la página www.cfestmexico.com