Texto íntegro:

El Estado mexicano valora la creatividad y el pensamiento de artistas e intelectuales, y reconoce el rigor y la innovación de nuestros investigadores y científicos.

El patrimonio artístico y cultural que nos han legado las generaciones que nos precedieron, han permitido que México sea reconocido en el mundo como un país milenario, cantera de creadores que han enriquecido las artes.

Estas raíces, además, son fuente y alimento para la vigorosa generación de creadores de hoy.

Por su parte, las ideas de avanzada de los intelectuales han sido fundamentales para impulsar nuestra vida democrática.

Sus reflexiones, respecto al acontecer nacional e internacional, y sobre las tendencias políticas, económicas y sociales, nos ayudan a comprender mejor el mundo en el que vivimos, y las decisiones que debemos tomar.

Además, los científicos mexicanos, formados en nuestras universidades, contribuyen desde la academia o desde su vinculación con el sector productivo, a integrarnos cada vez más en una sociedad del conocimiento, y a generar tecnologías propias, colaborando en la solución de los problemas nacionales.

La misión de los artistas y los científicos es de la mayor trascendencia en nuestro país.

Por todas estas razones, hoy, México hace un justo reconocimiento a quienes se han hecho merecedores del Premio Nacional de Ciencias y Artes 2015.

Se trata de una edición muy especial, porque este año, como lo refiriera el Secretario de Educación, se cumplen siete décadas de celebrar a los máximos representantes del arte y la ciencia.

Por la excelencia de su trabajo creativo, desde las más diversas expresiones del arte, hasta la artesanía popular, todos ustedes son un destacado ejemplo del genio creativo y del talento intelectual que distinguen a nuestro país.

En nombre del Gobierno de la República, les expreso nuestro reconocimiento y nuestra más amplia felicitación.

La cultura es la matriz que genera identidad y cohesión social; es nuestra casa común, la fuente de la que nacen nuestra idiosincrasia, nuestras tradiciones, nuestras costumbres, nuestra manera de ver y entender la vida.

Conscientes de su trascendencia para el desarrollo de nuestra Nación, desde el inicio de este Gobierno hemos dado un renovado impulso a la cultura.

En la presente Administración se han otorgado más de dos mil 200 estímulos, a través del Sistema Nacional de Creadores del Arte; así como 620 becas para jóvenes creadores, entre otros apoyos.

Se trata de un enorme esfuerzo nacional para fomentar la creación, para acrecentar el enorme legado con que el arte y la cultura enriquecen nuestra vida.

Son estímulos que se traducen en obras escénicas, en música, en literatura, en proyectos de rescate y divulgación de patrimonio; en las películas que son premiadas en México y en el mundo. Son estímulos a la libertad creativa y a la imaginación.

A través de este sistema nacional se apoya a escritores, músicos, pintores y a virtuosos de toda gama de expresiones artísticas.

Igualmente, se respalda a los jóvenes que están decididos a ser protagonistas de la cultura mexicana en los próximos años.

De la misma manera, estamos apoyando a los investigadores en ciencia y tecnología, promoviendo la creación del conocimiento, en beneficio de la sociedad mexicana.

Impulsar la labor de los artistas y científicos es, al final de cuentas, sembrar futuro; es proyectar lo mejor de una nación hacia el porvenir.

Convencido de ello, en mi Tercer Informe de Gobierno expresé a los mexicanos la decisión de crear la Secretaría de Cultura.

México es un país que reconoce el talento y la trascendencia de nuestros artistas y creadores.

Así quedó acreditado esta semana en el propio Congreso de la Unión, cuando apenas hace unas horas y en estos días, los legisladores federales aprobaron la creación de la Secretaría de Cultura del Gobierno de la República.

Quiero, en esta ceremonia, hacer un público reconocimiento al Poder Legislativo, por hacer realidad un largo anhelo de la comunidad cultural de nuestro país.

Conscientes del entusiasmo que ha generado este proyecto, aquí, en este mismo evento, teniéndoles a ustedes como testigos de honor, promulgaré la reforma aprobada, hace apenas, como ya decía yo, unas horas.

La creación de la Secretaría de Cultura es, sin duda, una decisión histórica, que permitirá articular los esfuerzos institucionales para hacer efectivo el acceso a la cultura, derecho consagrado en el Artículo 4º de nuestra Carta Magna.

Hay que decir que, sin duda, lo que hoy o lo que habrá de ser parte de la nueva Secretaría de Cultura, era parte de la anterior, bueno, hasta ahora todavía, Secretaría de Educación de nuestro país.

El propio Titular de esta Secretaría nos ha compartido los esfuerzos que se vienen haciendo para hacer realidad la educación en México y, sobre todo, que ésta sea de mayor calidad.

Creo que esto permitirá que estos dos grandes espacios, el de educación y el de la cultura, tengan esmerados esfuerzos de atención, de focalización de esfuerzos y que eso nos permita realmente avanzar en estos dos grandes campos del quehacer de nuestra sociedad.

La nueva Secretaría de Cultura no implicará, y debo aquí subrayarlo, mayor carga presupuestal.

Tampoco significará más burocracia, ni implicará afectación alguna a los derechos de los trabajadores de este importante sector.

Será una dependencia eficiente y deberá ser moderna, transparente e incluyente.

Su misión será brindar un efectivo respaldo público a los creadores, difundir el arte y la cultura, resguardar nuestro patrimonio histórico; salvaguardar y esto es verdaderamente relevante, nuestra pluralidad, así como acercar las actividades artísticas a nuestros niños y jóvenes.

Así será, porque un país con cultura es un país con sólidas bases para construir, día a día, un mejor futuro.