Por. Redacción/

La Comisión Permanente solicitó a las secretarías de Gobernación, y de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, reforzar las acciones y estrategias de combate a la delincuencia organizada, a fin de garantizar la seguridad e integridad de los trabajadores del campo y sus familias.

El documento refiere que la falta de una estrategia de seguridad eficaz, ha ocasionado que los delitos de extorsión, secuestro y robo, se hayan extendido a diversas regiones del país; tal es el caso del campo.

Señala que los grupos criminales han impuesto el pago de cuotas y controlado el precio de diversos productos, el pago de cosechas e, incluso, manipulan toda su comercialización.

Desde hace algunos años, continúa, los trabajadores del campo han denunciado el asedio por parte de integrantes de la delincuencia organizada. Líderes campesinos han hecho público que “sin financiamiento y asolados por la extorsión del crimen, muchos productores sólo cultivan para el autoconsumo, porque no están en riesgo la cosecha y la tierra, sino su vida”.

El dictamen de la Primera Comisión -Gobernación, Puntos Constitucionales y Justicia-, avalado en sesión de la Permanente, manifiesta que los jornaleros deben entregar 20 de los 80 pesos de su salario diario. Los dueños de las tierras pagan 120 pesos por cada hectárea de cultivo al mes, además de un mínimo de mil pesos por hectárea de maíz y las bodegas deben entregar al menos 100 pesos por cada tonelada de este grano.

Asimismo, indica que el Consejo Nacional Agropecuario (CNA) dio a conocer que “anualmente el campo mexicano sufre de un quebranto de más de dos mil 220 millones pesos en granos, maquinaria, equipos, fertilizantes, camiones y otros insumos, obra del crimen organizado”.

Explica que nuestro país es uno de los más grandes exportadores en el sector agroalimentario del mundo, y cuenta con el respaldo de sus productos, por la gran confianza de los consumidores internacionales.

El documento destaca la importancia que tiene el campo para la economía nacional; miles de mexicanas y mexicanos obtienen sus ingresos a partir de esta economía, de la cual depende su salud, alimentación y en general, el bienestar propio y de los integrantes de sus familias.