Por: Israel Mendoza Pérez/

La crisis interna en la que cayó Morena se debe a la desobediencia de la secretaria del partido Yeidckol Polevnsky. A final de cuentas, la dirigencia del partido en el poder aceptó la sentencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) que ordena al Instituto Nacional Electoral levantar una encuesta abierta para elegir al nuevo Comité Ejecutivo Nacional de ese partido. Sin embargo, la propuesta de resolver el tema del relevo en la dirigencia fue enviada desde hace un año por el presidente Andrés Manuel López Obrador a través de interpósita persona.

La empresaria-política se negó a hacer caso a la petición por la sencilla razón de negarse a perder el control del partido en el poder. Era el año de esplendor de Morena y ella acaparó los reflectores. Pero como no fue ella la emisaria de la propuesta del Presidente prefirió dar un manotazo y rezongar. Después comenzó el choque interno de los grupos y aspirantes legítimos hasta llegar a la inocua dirigencia interina de Alfonso Ramírez Cuéllar.

El 29 de agosto de 2019, Mario Delgado, coordinador de los diputados morenistas, acompañado por Tatiana Clouthier, fue el encargado de hacer visible la propuesta de López Obrador al partido. En su declaración señaló: “el presidente hizo una sugerencia de utilizar algo que está previsto en los Estatutos de Morena, como es la encuesta, resolvería muchos problemas. No dejemos que se vaya a echar a perder porque es la lucha de muchos años y de muchos millones de mexicanos”.

Sin embargo, Yeidckol Polevnsky, en ese momento presidenta en funciones, fue omisa al llamado. Prefirió pisar las aguas turbias de Morena y posteriormente enlodar al partido entre su inexperiencia política y su desobediencia. Ella echó a perder al movimiento fundado en 2015.

Prueba de ello es que, en 2019, el partido tenía 317 mil 595 afiliados y para el 31 de enero de este año con 278 mil 332 es decir una diferencia porcentual de -12%, según datos del INE. Si los números no son una muestra de sus decisiones equivocadas, entonces fue su propio carácter voluntarioso que evitó que Morena creciera.

A un año, el escenario es diferente para Morena. El reciente video en el que se captó a Pío López Obrador recibiendo dinero empaquetado de la mano de David León tiene un costo político para el partido. No se queda en la atmósfera de los pasillos de Palacio Nacional. Permea hasta el partido en el poder, pues a final de cuentas fue primero el movimiento político y luego la construcción de la cuatroté.

La crisis provocada por Yeidckol Polevnsky tiene al partido en una situación tensa y llevó a los aspirantes a la dirigencia una confrontación prolongada. Ella violentó los estatutos del partido al atentar contra el respeto de los principios democráticos en la vida interna de Morena. Su desobediencia la ponen en una situación de abrir un procedimiento de expulsión en su contra ya que no pudo controlar su ambición política.