Por: Montserrat Sánchez Maldonado

De acuerdo con el Partido Acción Nacional (PAN), el tema de la movilidad en la capital debe dejar de ser un esfuerzo aislado, como es el caso del Distrito Federal, por lo que se debe contar con una regulación a nivel nacional, aseguró la Vicecoordinadora general y senadora del grupo parlamentario del partido blanquiazul,  Mariana Gómez del Campo Gurza.

En este sentido, al participar en el XI Foro Nacional y conversatorio “Retos legislativos para ciudades humanas y seguras”, convocado por el Grupo Mexicano de Parlamentarios para el Hábitat, la legisladora confió que en el actual período de sesiones del Senado se pueda discutir al respecto.

Consideró que una legislación nacional, como lo representa el Senado, se deberían incluir los temas de movilidad y  seguridad, los cuales son conceptos que deben ir de la mano pues son clave y ejes rectores en el desarrollo de nuestros centros urbanos.

“No podemos pensar en tener ciudades modernas si no se garantiza antes la seguridad de circulación tanto de peatones como de vehículos, así como la protección de todos los usuarios del transporte”, declaró.

Destacó que uno de los principales retos es la disminución de los accidentes de tránsito y agregó que de acuerdo con datos de la Organización Panamericana de la Salud, México ocupa el séptimo lugar a nivel mundial en muertes por accidentes de tránsito, y en esto no solamente estamos hablando de pérdidas humanas, sino también resulta muy costoso para el sector salud.

La senadora propuso que ara atender el problema, se  tiene que solucionar la situación desde la raíz, por un lado en cuanto a seguridad vial, donde las zonas urbanas representan el mayor riesgo, pues en ellas ocurren el 94 por ciento de los accidentes de tránsito y el 43 por ciento de los decesos.

También, remarcó, la importancia de  actuar rápido, pues estimaciones de la Organización Mundial de la Salud señalan que de no mejorarse la seguridad vial en nuestro país, para 2020 más de 19 mil mexicanos habrán muerto a causa de accidentes de tránsito.

En este sentido, recordó que el tema de la seguridad va de la mano con el de los accidentes causados por consumo las bebidas alcohólicas.

En México, prosiguió, los días jueves, viernes y sábado por la noche se movilizan alrededor de 200 mil conductores bajo el influjo del alcohol, y por eso es bueno que exista el programa del Alcoholímetro, que “yo espero que exista y pueda aplicarse en muchos otros estados de la República porque ha sido positivo” y no ha sido todavía un programa contaminado por la corrupción.

Asimismo, dijo que “nos da mucho gusto que cada vez se utilice más la bicicleta, y lo vemos en las zonas metropolitanas, pero también nos daría mucho gusto ver crecer la infraestructura para poder utilizar la bicicleta y también dejarla en lugares seguros”.

Además –indicó– la legislación nacional sobre movilidad deberá incluir el tema de la infraestructura adecuada, pues todo lo nuevo que se construya en esta materia tiene que considerar a la bicicleta y la posibilidad de que se puedan utilizar más motocicletas, motonetas, bicis eléctricas, entre otras opciones.

Por otra parte, se pronunció por contar con un mejor transporte público, tener un Sistema de Transporte Colectivo Metro “a la altura de los capitalinos y no como ocurrió con la Línea 12 o con algunas otras líneas que por planear mal las cosas hoy, alrededor de medio millón de capitalinos se han visto afectados, sin hablar de las pérdidas económicas”.

De igual forma, el senador panista Francisco Búrquez Valenzuela destacó que cuando se diseña el espacio público es para siempre y por lo tanto debe contar con una visión de largo plazo, ya que lo que no se diseña bien termina mal.

El también presidente de la Comisión de Desarrollo Urbano y Ordenación Territorial afirmó que las ciudades humanas y seguras pueden ser resueltas desde un buen diseño del espacio público, que había venido evolucionando a través de milenios del ser humano acostumbrado a vivir en ciudades.

“Muchos de los problemas de seguridad que hoy tenemos en las ciudades están enmarcados en el mal diseño del espacio público o en el abandono de las autoridades en los tres órdenes de gobierno de esta gran responsabilidad”, manifestó Búrquez Valenzuela.

Al finalizar, consideró que la regulación vial tiene sus límites y pretender resolver muchos de los problemas de seguridad vía alcoholímetros, topes, límites máximos de velocidad, es tratar de resolver síntomas; la prevención de estas graves situaciones de inseguridad vial está en el buen diseño del espacio público, de interconectividad, de vialidades de uso compartido.