Por: Redacción/

Como parte del trabajo conjunto del Gobierno de la Ciudad de México con instancias nacionales e internacionales en materia de atención y respeto a los derechos humanos de las y los migrantes, la capital del país se reafirma como Ciudad Santuario, Refugio y Huésped para todas las personas que, por distintas razones, se ven obligados a abandonar su país natal en busca de mejores oportunidades, así lo señaló el Jefe de Gobierno, José Ramón Amieva Gálvez.

Durante la presentación del libro y conversatorio “Programas Sociales para Población Migrante en la Ciudad de México: Identificación de Buenas Prácticas y Recomendaciones en Materia de Inserción Laboral”, el mandatario capitalino dijo que la ciudad busca generar una inclusión total del reconocimiento pleno de los derechos humanos para todas y todos como está establecido en la Constitución local.

“Con estas tres declaratorias se deja claro el valor y el orgullo que sentimos en la capital del país a la dimensión pluricultural de la que estamos constituidos, resultado del gran mosaico formado por la población migrante que hay y seguirá arribando a nuestra ciudad, quienes nos han heredado sus costumbres, formando así nuestra identidad como una de nuestras características sociodemográficas”, añadió.

Dio a conocer que tras un acercamiento con la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCDMX), la administración que encabeza ofreció generar un puente humanitario conformado por tres ejes de actuación en apoyo al éxodo migrante integrada por más de siete mil personas.

Primero, propuso conformar brigadas de médicos, trabajadores sociales, educadoras, entre otros, que acudan a los sitios donde se localiza la población migrante para brindarles atención humanitaria urgente, con el apoyo de la sociedad civil organizada y la población.

Como segundo punto, el Jefe de Gobierno informó que se abrirán centros de acopio en la Ciudad de México donde, de manera honesta y responsable, se recopilarán artículos de primera necesidad para la caravana migrante localizada en estos momentos en el sur del país, siempre bajo la vigilancia de las comisiones de Derechos Humanos.

Tercero, trabajar en la reinserción de personas refugiadas para generar un catálogo de derechos que sea incluyente bajo el principio de igualdad para todas y todos, como la inclusión laboral.

“Para nosotros, cualquier persona que es expulsada y obligada a abandonar a su familia, casa, actividades y que, con el temor de lo incierto y el sufrimiento que generan las enfermedades y vicisitudes, traspasa una frontera, es algo que bajo un sentido de hermandad y de humanismo nos duele mucho”, comentó al detallar que su gobierno no puede esperar a que lleguen para brindarles todo el apoyo y la solidaridad.

No son dádivas ni ayudas, agregó, se trata de garantizar derechos para que el tiempo que las personas migrantes estén aquí, cuenten con un espacio donde atiendan su salud, alimentación y pernocta segura, e incluso, para tener un momento de integración con las familias y así recargar la pila del corazón.

La secretaria del Trabajo y Fomento al Empleo (STyFE), Claudia Luengas Escudero, indicó que en el texto presentado se identifican buenas prácticas de un modelo de inserción para migrantes, el cual se ha construido en la CDMX cuando fue declarada Ciudad Santuario, y se instruyó a todas las dependencias a modificar las reglas de operación de sus programas sociales para incluir como sujetos de derechos a todos los migrantes y huéspedes.

“Con ese decreto, en la Secretaría del Trabajo se modificaron las reglas de operación de los programas sociales y así fue como nació el modelo de atención. Es un trabajo de años que se ha construido a través de ir dotando a la ciudad de instrumentos jurídicos y administrativos que dieron paso a un modelo de atención integral a migrantes”, sostuvo.

La coordinadora de Políticas para Migrantes y Promoción del Trabajo Académico de Sao Paulo, Brasil, Marina Monteiro Luna, consideró que la Ciudad de México ha sido pionera en la región y fuente de inspiración en la integración de personas migrantes.

“Sao Paulo, así como la Ciudad de México, han tenido una experiencia innovadora de cambio de paradigmas para la perspectiva de protección de derechos humanos de los inmigrantes independientemente de su estatus migratorio o documental”, señaló al tiempo que resaltó las oportunidades de aprendizaje mutuo de las políticas públicas con esta ciudad.

El especialista subregional en Migraciones Laborales de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Francesco Carella, celebró las buenas prácticas de la CDMX en un sector tan importante como las políticas sociales para las personas en situación de movilidad humana, que incluye a los migrantes internos de otros estados del país, como los mexicanos retornados del extranjero, los refugiados y solicitantes de asilo, los trabajadores migrantes en situación migratoria regular e irregular.

“Este estudio analítico y descriptivo donde se critican las diferentes políticas y se escuchan las voces de los funcionarios públicos y usuarios de programas sociales, nos permite ver los resultados concretos de las políticas públicas existentes, resultado de un principio consagrado en la Constitución local, según el cual es una ciudad incluyente y santuario donde se respetan los derechos de las poblaciones migrantes”, abundó al recordar que en 2017 la Secretaría del Trabajo y la OIT firmaron un Memorándum de Entendimiento para trabajar conjuntamente en materia de migración y movilidad laboral para dar paso a este estudio presentado el día de hoy.